Que hayan sido primero y segundo del Tour 2023 los mismos corredores que llevan copando ambas posiciones de la carrera desde 2021 no es nada halagüeño. Ni siquiera la rivalidad Armstrong-Ullrich se prolongó tanto tiempo, en las mismas posiciones.
Todo el mundo contento con el duopolio inexacto entre Vingegaard y Pogacar, porque hay cierta incertidumbre hasta que llegan las etapas decisivas, y porque el esloveno ataca mucho, produciendo pocos resultados. Espectáculo entrecomillado, mientras el resto de corredores ven por la ventanilla.
Dado que el segundo clasificado ya ha tenido atención aparte, porque es sobre el que se ciernen las dudas, solo cabe centrar la atención en el legítimo ganador, siempre atento y que ha sabido correr muy inteligentemente: más allá de la crono sideral -y muy bien preparada-, Vingegaard ha tenido muestras de gran campeón cuando, por ejemplo, dejó a Pogacar cebarse durante dos km. del Puy de Dome, y otros puertos, sabiendo que no se iba a ir.
Un campeón tranquilo, poco dado a aspavientos, y que no gusta mucho a la prensa, enamorada del wonder boy esloveno, mucho más mediático, que hace cucamonas, y saca la lengua. Dos Tour seguidos están al alcance de muy pocos, y obliga al campeón danés a volver a Tour con el aura de gran favorito, cosa que no tenía en esa edición salvo para una minoría.
El mejor en la crono dos años seguidos -en 2022 no ganó la etapa porque frenó para que ganase Van Aert- y el mejor en la montaña por tercer año consecutivo hace muy difícil atisbar quien pueda inquietarle, más allá de Pogacar y su rendimiento menguante. ¿Habrá una era Vingegaard? Ya es tarde para pronunciarse sobre el asunto, y el corredor sigue siendo extremadamente sospechoso por su trayectoria, su país, su equipo y, por qué no decirlo, su rendimiento en la carretera. ¿Hubo una era Froome? Sí. Pues eso.
Pogacar, segundo clasificado, ya ha marcado una época en el Tour. Son escasísimos los corredores que se han subido cuatro años seguidos al podio del Tour, mucho menos los que lo han hecho como 1º-1º-2º-2º, ganando en esos cuatro años 12 etapas, mayoritariamente sprints en montaña. Creo que esto último dice mucho de por dónde irán los años venideros del talento esloveno, un auténtico Rey Sol en torno al cual gira todo el ciclismo de febrero a octubre.
Adam Yates es un sorprendente tercer clasificado, a más de diez minutos. Avisaban de que llegaba muy bien, y para él fue la primera etapa y el primer liderato. Poco más se puede decir de un corredor que ha ido a lo suyo, aportando muy poco a su lejano líder, y que ha servido para dejar una estampa clásica del podio de París: el ganador flanqueado por dos rivales compañeros de equipo, como aquel año que la Patrulla Canina navarra se encaprichó por tener a Piti, en decrimento de las opciones reales de ganar de Quintana.
Simon Yates también se vistió de protagonista el primer día. Su carrera ha sido muy constante, siempre en las posiciones de merecimiento, algo raro en su trayectoria deportiva. Su mejor Tour, una carrera que ha esquivado muchas veces, y que este año ha preparado específicamente. Intentó ganar la supuesta etapa reina, y se quedó a un puñado de segundos. Por edad, trayectoria y rendimiento, es su techo en la carrera, una que acumula una victoria solitaria y lejana en la Vuelta -volvió en 2022, no acabó-, un podio en el Giro, y un cuarto puesto en el Tour, por un total de 10 etapas en grandes vueltas. En el País Vasco estaría en el top-three de los mejores corredores de siempre.
El quinto puesto de Carlos Rodríguez sabe a poco para los españolistas dispuestos a subirse al primer carro que pase. ¿Se cayó Enric Mas el primer día? Pues a por otro nuevo, aunque nadie -salvo este espacio- le diese pábulo para acabar tan alto. Su etapa está entre los mejores momentos de los últimos Tour, y aunque haya ido cayendo del tercer al cuarto y al quinto puesto final, hay que tener en cuenta su edad y su temprano debut. Lo único reprochable es esa tendencia a caerse.
Bilbao es una corredor de quedar entre los puestos cuarto y sexto. Plena coherencia y luminosidad constante. Su resultado final es fruto de haberse metido en una escapada que cogió tres minutos de diferencia, bonificaciones, y saber aguantar en ese espacio por definir entre los favoritos, los aspirantes, y lo que no son nada. Por edad, trayectoria y personalidad, su mejor resultado en el Tour, y no se va a repetir.
El australiano Hindley fue de más a menos. Su victoria y liderato el quinto día de carrera es toda una lección de cómo afrontar la carrera desde unas premisas ciertas y reales: no voy a ganar, pero puedo hacer daño y llevarme una gloria real. Su etapa vale por toda la carrera deportiva de Mancebo, Mas, Zubeldia y tantos otros corredores. Juntos. El séptimo puesto final no refleja su auténtica valía, y es tremendamente injusto, porque ha sido más protagonista y valiente que Simon Yates.
Gall puede llegar a ser el mejor escalador del pelotón. Una figura en franco retroceso (¿qué ha sido de los colombianos?) y que siempre tendrá espacio en el ciclismo. Su victoria en Courchevel, muy sufrida y trabajada, sirve también para afirmar que se puede hacer una gran Vuelta a Suiza y un gran Tour de Francia, como ya demostró Bernal en 2019. Un corredor que ya no podrá volver a ser anónimo, y que ojalá rompa el cerco de los escaladores: no hace falta ir en escapada para ganar, también se puede ir con los favoritos, como se vió en la penúltima etapa.
Gaudu y Martin, noveno y décimo, cumplieron con la cuota francesa, en el caso del primero muy por debajo de las expectativas. Su carrera ha sido muy anónima, salvo en el caso del corredor del Cofidis, fundamental en el triunfo de etapa de su compañero Ion Izagirre. La montaña ha ido a Ciccone -digno sucesor de Pellizotti, ganador en 2009 de la misma manera, aunque después perdió el triunfo por ir drogado hasta las cejas-, el típico escalador italiano oportunista, al que parece irle bien el Tour.
En los sprints ha dominado Philipsen, mezcla de velocidad, equipo y marrullería, y se confirma como el rey de los más rápidos, ante la incomparencia de Jakobsen -caída y abandono tras mucho sufrimiento-, Groenewegen -amortizado- y la decadencia total de Ewan. Por equipos ha ganado el Jumbo -como para no- y destacar que, de los ocho primeros de la general, siete han ganado etapa, algo realmente raro en los Tour y grandes vueltas más recientes. Ha sido un Tour de protagonistas, con grandes etapas de esas que se ven raramente, pero excesivamente centrado en Vingegaard-Pogacar.
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Los palanganeros de la Patrulla Canina han terminado contando los kilómetros yendo en fuga como parte de los resultados. Era algo previsible, pero nunca pensé que fuese a ser tan divertido. Tan, tan divertido. Es exactamente lo que se hace con los equipos continentales e invitados a las carreras.
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¿Zapatillas minimalistas? ¿Existe tal concepto? ¿Cuándo se acabará esto?
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“El Mono de Madeira quiere comprar el periódico portugués al que demandó varias veces”. Así funciona el mundo. Por eso compró PRISA, en 1992, Antena 3 radio. Y que nadie dude de que si Armstrong hubiese podido, hubiese comprado el periódico donde publicaba David Walsh. Para despedirlo. Da miedo el creciente protagonismo del dinero saudí en el deporte, y lo que vaya a pasar.
En relación al último suelto, se habla de un posible patrocinio saudí para el Jumbo. Espero que no sea así finalmente.
Creo que es para la Patrulla Canina, aunque Jumbo anda buscando patrocinador y supongo que se habrán ofrecido.
Sabía yo que Ryder y compañía iban a ser incapaces de encontrar un patrocinador español que sustituyera al antiguo imperio telefónico…
Creo que iba a ser una filial de Repsol del Golfo Pérsico relacionada con las renovables la que iba a entrar en la Patrulla.
Pues parece que es Jumbo finalmente. Era el patrocinador con el que contaba Unzué para fichar a Carlos Rodríguez.
Significativo el dato de los 8 primeros; 7 de ellos con victoria de etapa ¿Quiere decir que pocas de las etapas decisivas se han regalado? Lafay, Asgreen o Mohoric se han llevado las victorias que previsiblemente eran de Van Aert o Van der Poel. Van Aert ha sido el corredor mas decisivo de este tour junto con los dos primeros, aunque no lo menciones porque tal vez sea innecesario.
Gracias por este tour Sergio.
Lo que deja claro este tour es que aquello de las “ganancias marginales” que puso de moda el Team Sky sigue vigente. Cualquier corredor que ficha por el duo Gianetti-Matxin o Jumbo mejora los resultados de manera “espectacular”. No hace falta más que ir a cualquier web de resultados y mirar a cualquier corredor antes y después. Lo que me resulta curioso son las sospechas de las principales comentaristas con Vingegaard mientras se arrodillan y se enjuagan la boca ante los talentos del otro duo…
(Marc Soler está llorando en esa esquina por tu culpa, ser despiadado)
Hirschi te agradece tu loa. Y lo hace desde el primer escalón del podium de la Villafranca-Ordizia!
Un saludo
No es el caso de Hirschi, ni de Marc Soler, ni de Grosschartner.
Sobre el suelto del Movistar me parece brutal que en los últimos 20 años haya ganado 13 etapas un equipo que ha tenido a Valverde y a Quintana!!!!
Pogacar, lleva 11 en 4 años… y sé que no es lo mismo, pero hablamos de un Valverde que durante muchos años tuvo el mejor sprint en cuesta del pelotón y de Quintana de los pocos capaces de atacar desde abajo (no agarrado a) haciendo diferencias
https://imagenes.diariodenavarra.es/files/content_image_mobile_filter/uploads/2023/07/23/64bd8430b6a25.jpeg
Valverde estuvo diez años yendo al Tour y sin ganar ni una etapa. Diez años. Dice muchísimo sobre su carrera y su equipo.
No le ganó un final en cuesta a Armstrong?
Si, en su debut. Después, entre 2013 y 2022 corrió un montón de Tour sin ninguna victoria.
Debut en el que al día siguiente de esa impresionante victoria en montaña (courchevel) ante el todopoderoso armstrong (que no se creia ni él lo que estaba viendo) valverde tuvo que abandonar el tour por un “golpe en la rodilla” jajaja.
Primeras sanciones encubiertas.
No, al día siguiente subió el Galibier el año en que lo coronaron 40 arriba, cosas de la mafia texana, por delante iba Vinokourov en una etapa absurda entre dopados hasta las cejas. Después fue cuando le sobrevino lo de la rodilla, siendo quinto de la general.
Cierto, no lo recordaba pero es verdad, hubo 2 etapas de por medio antes de aquella rerirada.
Por aquel entonces me sorprendía una retirada así por un golpe en la rodilla, pero asumí que no podía haber otro motivo, iluso de mí!
¿Y el Tour de Pereiro? Cero etapas y acabaron 6 de 9. Y la victoria final se la lleva el gallego.
Iba a decir que esto es un guión de peli de los hermanos Marx, pero no, es un sketch de “Top Secret”.
El tema con Vingegaard ya no es que sea el mejor de los que hay actualmente, es que los que tienen ahora entre 20-23 años tampoco son (ni van a ser) mejores que él. Lo tiene todo (talento, equipo y edad) para marcar una era en las vueltas por etapas. Veremos qué pasa, porque este deporte nunca pierde la capacidad de sorprendernos.
Un saludo a todos.
¿Quién sabe? Fíjate en el propio Vingegaard con 23 años…
No desprecies hasta donde puede llegar la “medicina deportiva”. De hecho revisa, revisa a los jóvenes de 19-22 años que tiene en plantilla Jumbo (y en su filial) y te sorprenderán lo que están haciendo.
No seré yo el que diga que lo de Vingegaard es todo legal y que el aumento de rendimiento se deba a las ganancias marginales, pero el nivel de preparación y profesionalidad de algunos equipos comparado con el de otros (véase el documental del Movistar) en algo se tiene que notar. La impresión es que el 90% de los directores – managers de equipos del tour funcionan de forma muy parecida a como lo hace un equipo o club aficionado. Servirá de algo o no, no lo se, pero el nivel de estudio de ciertas cosas en el Jumbo e Ineos en algo se tiene que notar. Mismamente el cambio de bicicleta, ¿como puede haber equipos hoy en día que no sepan exactamente lo que se gana o pierde cambiando de bicicleta?. A estos niveles tienen que saber exactamente la diferencia entre una bici y otra y la potencia que genera cada corredor con cada una de ellas.
Yo el único talento que le veo es haber tomado la decisión Flakemore inversa. Me da igual morir a los cincuenta si es con seis tours en el palmarés. El resto sí lo tiene de su lado, un gran equipo, más allá de los nombres, que planifica bien aunque a veces la cague (muchas menos de las que le achacan los de “no entiendo al Jumbo”), que acompaña y que acepta gustoso tener a gente tan “cambiante”, tan del ciclismo que cambia, como Jonas.
Gracias por tu dedicación. De lo mejor del Tour. Quitando unos pocos días, se ha visto ciclismo decente. Dentro de las miserias del “ciclismo que cambia”, hay ¿esperanza? Con un diseño de recorrido cuestionable, sin etapas de resistencia, con un duopolio claro ha habido ciclismo de verdad y no el maloliente “ciclismo de julio”. Y ahora el Mundial y dos carreras, la Vuelta y Lombardía, que habitualmente parecían platos recalentados, con mucho interés.
Un abrazo y que tengas un buen verano. No se si te atreverás otro año más por Galicia ahora que hemos evitado el narcoestado gallegocrático. Te esperamos con los brazos abiertos.
Buenas noches al creador del blog y a su excelsa legión de seguidores.
Antes de pronunciarme de forma respetuosa sobre lo acontecido en este recién finalizado Tour, no sería honrado ni mucho menos educado por el que esto escribe, no darles a todos ustedes las gracias por la acogida que he recibido en este espacio y que cuyo sentimiento es recíproco.
Personalmente creo que ha sido un Tour notable en su conjunto. Mucho más (como casi siempre) por la actitud de los corredores que por el recorrido en sí. Sin entrar en profundidad en el trazado, sigo echando de menos etapas de verdadero fondo (210-225 km) con puertos encadenados por encima de los 2000 mts de altitud donde la gente se queda literalmente de madura y por extensión, cronometradas más allá de los 45 kilómetros. Lo sé, los organizadores de pruebas de 3 semanas quieren llevar la carrera sujeta hasta la última semana y que la teórica incertidumbre dure el máximo tiempo posible. Observen aquí que esto sería tan fácil como meter el último día una crono para alargar dicho interés. Pero volver a 1989 (uno de los mejores Tours junto al de 1986) no debe ser plato de gusto ni para el ganador, ni para el vencido. Eso sin contar los enormes problemas que conlleva tener cerrado un trazado como fue el del 89 entre Versalles-París y que fue de 24,500 kilómetros. Fue acabar la crono con la entrada del malogrado Fignon y finalizó el Tour.
El creador del blog insiste de forma educada la tendencia repetitiva del duopolio prácticamente desde hace 4 años y más concretamente desde hace tres. Pero como usted bien sabe, están dos escalones por encima de los demás. Y es aquí donde quisiera centrarme de forma más profunda sobre los dos grandes protagonistas y un tercero en discordia al que muy inteligentemente deja deslizar en su escrito el Sr. Sergio.
Antes de empezar, la balanza entre ambos se decantaba un poco más en favor del esloveno (como bien apunta, independientemente de ser un portento, cae mucho mejor) versus el danés y haciendo mucho hincapié la mayoría de entendidos, que lo del año pasado fue un error (sufre enormemente por encima de los 2000 nts de altitud) y que aprende rápido.
Sin embargo, el Sr. Gianetti se apresuró a decir antes de empezar la contienda, que la capitanía sería compartida entre Pogaçar y el británico Adam Yates. Nadie, absolutamente nadie, le creyó. Y aunque la primera etapa se la llevó el corredor de UAE en compañía (no fue casualidad) de su hermano Simon, aun así, nadie lo veía.
Este es un espacio donde abunda el conocimiento y la sapiencia de este nuestro maravilloso deporte. Y créanme, detrás de cada equipo, siempre hay historias que nunca, nunca, nunca trascienden al exterior. Mucho se habló del herpes labial del esloveno (síntoma inequívoco de alteración en su sistema inmunológico, concretamente de la sería blanca) pero eso solo es la punta del iceberg. Solo el médico, y en este caso el fisiólogo determinarán la gravedad del mismo, midiendo y cotejando otros parámetros como por ejemplo las CK. Disculpen la observación y el tostón científico, pero les digo todo esto para hilar con el comportamiento en carrera de ambos. Mucho se escribió y hablo sobre en qué condiciones llegaba Pogaçar después de la rotura de escafoides, e insisto, solo el cuerpo técnico de UAE era consciente de ello. Ni que decir tiene (y ustedes lo saben perfectamente) que cuando un gregario tira, trabaja y tensa hasta que se aparta, llega a minutada de su líder. Pues bien, eso nunca pasó con Adam Yates. Encabezaba de vez en cuando el grupo, se quedaba con su real líder por méritos propios, pero nunca se desfondó. Es decir, siempre guardó y lo hizo por dos motivos bien claros. Estrategia de equipo y egoísmo propio. Nada nuevo en el imperio británico (Pidcock ha sido un claro exponente) y donde encontrar un Castroviejo es poseer una mina de potosí. Sobre el danés, diré que siempre me han gustado los corredores serios, discretos, disciplinados y que hablan en el foro que les toca…la carretera.
Del resto me quedo con el austríaco Gall y sus reiterados intentos por, primero filtrarse en fugas y luego rematar el buen trabajo de sus compañeros (menudo tour el de O’Connor) del Ag2R en la etapa del Col de Loze y la ratificación paso a paso que lleva haciendo desde juveniles el granadino Rodríguez (que seriedad, sensatez y visión de la cosas con el respeto como bandera) y en espera que vaya minimizando las caidas para no hipotecar lo mucho conseguido (la bajada del Joux Plane no está al alcance de todos) día a día. Le faltará explosividad, pero la suple con valentía y arrojo sin perder lectura de carrera. La última etapa del Tour del Porvenir, fue una tarjeta de presentación que extiende al Tour de este año. La pregunta es, si le llegará para ganarlo algún año.
El triunfo de Asgreen con sus tres compañeros de escapada, son otra demostración del poderío de los verdaderos rodadores ante aquellos que creen que serán engullidos por el pelotón en cualquier momento, menospreciando el valor intrínseco de los 4 que van por delante. Lo dije en su momento, insisto, cuánta falta le hace al ciclismo de tres semanas estas etapas y cuántos corredores más como el siempre infatigable Campenaerts.
Nada más, ha sido un verdadero placer compartir con todos ustedes éstas líneas.
Atentamente
Hola, de los Yates el que ganó la Vuelta fue Simon; que andaba bastante más que Adam hasta este año…
Un saludo.
Si, es lo que pongo en el blog.
Bueno, cuando empezaron no. A partir de la Vuelta 2018 sí, pero muy irregular Simon, con su blancazo de rosa en el Giro en pleno Finestre, tercero en el Giro del 21,… Me resulta alguien particularmente extraño, y ambos hermanos con un estilo tremendo moviendo el desarrollo de la bici de pie. Estoy muy de acuerdo con el resumen del top-10, ha sido un Tour de atacantes y, definitivamente, un buen Tour si nos atenemos al espectáculo. Ha habido tres o cuatro etapas de montaña dignas de tal nombre, lo que es mucho decir, y si esto sirve de ejemplo, las llegadas han sido o bajando (Courchevel, Morzine) o con puertos lejos de ser duros (Cauterets, la cuesta de Courchevel).
Muchísimas gracias, Sergio, por el fantástico seguimiento.
Supongo que desde el Tour se va a intentar fomentar está rivalidad y, por tanto, la tendencia al “guillenismo” en el diseño se acentúe, para que Pogaçar tenga más opciones. Esto era lo que se decía de los Tours de Indurain, ¿no? Que cada año se diseñaban buscando dar más oportunidades a los rivales del navarro (yo era un chaval y recuerdo que el perriodismo era lo que decía).
No se. Cuando Dumoulin llegó a ser un rival serio de Froome -dos años-, el Tour no programó cronos de 40 o 50 km. La última vez que lo hizo fue en 2012, precisamente para favorecer a Wiggins y la expansión del ciclismo británico.
Creo que en esa época aún soñaban con Bardet y Pinot, no podían excederse con los kms contrarreloj, de todas formas Dumoulin solo fué una vez al Tour con opciones de ganar, y ganó a Froome, pero no a Thomas…
Y por si acaso le penalizaron con un minuto por un tras coche al principio por una avería. Diría que acabó segundo
como a 1.15 de Thomas
Y pero si Froome era igual de fuerte en cronos; Dumo era de igual estilo, difícil retocar variables para favorecerlo siendo que los dos de Sky iban muy bien en cri y montaña
Qué miedo da Pogacar en esa foto, ¿no? Por lo menos, a mí me lo da.
Este Tour se presentaba como la revancha de Pogacar VS Vingegaard o la confirmación definitiva del danés.
Pues el desenlace no deja dudas y ahora mismo Vingegaard es inalcanzable. Así de rotundo, su crono marciana, estratosférica… Y su condición indudable de mejor escalador hacen que salvo caídas la racha de Vingegaard se pueda prolongar unos años más, porque no será Pogacar el que le pueda arrebatar un Tour, será una irrupción/transformación que no veo cercana.
Otra cosa es que el esloveno sea un ciclista espectacular, no hay duda, pero su rival es el hombre Tour perfecto, completo y con equipazo. En el Tour y grandes vueltas no tengo dudas.
El debate de quién es mejor entre los 2 será constante, Pogacar aspira a todas las carreras y monumentos cosa que Vingegaard no. Es un acierto que el danés se apunte a la Vuelta, si quiere instalarse en la élite histórica ese palmarés hay que completarlo: mundial, Lombardía, Lieja, giro, vuelta…
Eso sí, aunque no sea lo más sensato, a Pogacar hay que rogarle que vaya al Tour, que gane etapas e intente de todo, porque sino el paseo del danés será como el de los de Armstrong sin Ullrich.
Hablando del ciclismo que cambia, Lafay ha pasado de ganar una etapa con arrancada dejando a todos los favoritos atras, a no saberse nada mas de el, y abandonar el penúltimo día. Un sputnik, vamos. Gran candidato al Zakarin.
Se cayó. Ganó como un auténtico finisheur. Parece que queda lejos, pero la etapa y su victoria están entre lo mejor del Tour. De hecho, es más creíble su actuación los dos primeros días que estar todos los días como Sagan, Van Aert, Healy o Gee, por citar un puñado.
Yo supongo que se habría preparado para estar a tope los primeros días y luego su forma habría bajado.
No al nivel del año pasado, pero hemos tenido un buen Tour, lo cual se agradece.
Enlanzando con el post anterior, Pogaçar tendrá un dilema sobre el calendario a escoger, aunque ir a por el Tour es jugárselo todo a una carta frente a un ciclista cuyo objetivo es el Tour y así prepara la temporada, que tiene algo, que se me entienda bien, parecido a Induráin a la hora de preparar el Tour, de no quemarse en esfuerzos poco fructíferos y que sabe que el día que haga diferencias deja el Tour medio sentenciado. Aparte que Vingegaard tiene un equipo por detrás de un nivel tremendo en el cual está Van Aert.
Por lo demás, fantástico Tour de Carlos Rodríguez, del cual espero que Ineos no lo deje escapar, y creo que viendo los problemas para encontrar un hombre para las generales no lo dejarán escapar.
Por lo demás, coincido plenamente en que, como los de Contador, Landa o Van de Poel, los fanáticos de Pogaçar son insoportables, incluso no descarto que sean los mismos. Lo de burlarse de Vingegaard por su vigilancia alegando falta de grandeza, lo de dudar de su limpieza a la par que no dudan de la del esloveno o lo de romantizar la derrota como el día de Courchevel son cosas ridículas.
Pareces nuevo en este blog. Coge los posts sobre el tour de Flandes de los dos últimos años y léete los comentarios, a ver si los fans de Van der Poel son los mismos que los de Pogacar.
En la nota de ‘serresiete’ menciona que tuvieron que restaurar un ático luego de hacer públicas unas reformas en las redes sociales por parte de Georgina. Me hace acordar a cuando en plena cuarentena familias de futbolistas se juntaban a comer y luego publicaban fotos en las redes. Me flipa ver como personas se joden a sí mismas por no poder lidiar con su impulso de publicar en instagram toda su vida. La vida moderna pone a esa gente en un dilema: ‘si no posteo lo que acabo de vivir, lo he vivido realmente?’
En cuanto al Tour, concuerdo con las observaciones que haces Sergio.
Me da cierta decepción Hindley, pensé que tendría un techo un poco más alto.
Gronewegen ya ha pasado a mejor vida? O quedan chances de recuperar a ese sprinter que arrasaba?
De Gaudú (los franceses no son de mi devoción) rescatar que no se vino a pique al darse cuenta que no estaba más que para 9no o 10mo, remó con las piernas que tuvo, recibió un chorro de agua en la cara a mansalva por un fan que seguro no le quería mucho, se cayó de forma extraña en una curva en bajada, y seguro se disculpó con Demare al regresar a su casa… (…not!)
Leí que Pogi preparó el Tour con 5 semanas de rodillo por la lesión… que porcentaje de rendimiento le habrá mermado? Centrandose solo en el Tour, puede ganarlo fácil?
Gracias Sergio nuevamente, por el blog, tus opiniones, y la de los foreros, que disfruto mucho leer.
P.s: como viene la lista de candidatos al Zakarin? Healy? Vingegaard?
¿Que Gaudu se cayó de forma extraña? Se puso a beber agua en bajada, justo en una curva de herradura.
Y estoy casi seguro que apretó el freno delantero.
Y qué tiene de malo el calzado minimalista? Respuesta argumentada y con algún tipo de ciencia detrás por favor. Gracias.
Yo te digo el que: nada. Llevo usándolo ya más de 12 años, sea invierno o verano.
Sergio, a tu pregunta de qué pasó con los colombianos no puede evitarse responder con las sanciones e investigaciones a Quintana y MA López.
Por otro lado, ¿cómo hubiera cantado lo del Jumbo si Kuss no se hubiera caído y hubiera terminado en el sexto lugar en el que iba? Eso de los gregarios que terminan igual o mejor que los líderes suena tanto a los Tours de Froome y Thomas, o de Armstrong y Azevedo…
Si un gregario de Jumbo hace top ten mal, no como Adam Yates. Pogacar bien, da espectáculo y es simpático, le gusta el ciclismo, no como a los otros que están ahí por dinero.
También es cierto que Adam Yates podría ser jefe de filas en el 95% de los equipos, o sea: no es un gregario cualquiera, fichó como gregario y ha hecho su carrera.
No veo a Kuss liderando un equipo como sí lo hizo en su momento Adam en el GreenEdge.
Me resulta curioso la poca importancia que se le da en este espacio y otros medios tradicionales a la avería que se hizo Pogaçar a 2 meses de la salida del tour. Le cambiaron todos los planes.
Mientras otros hacían las clásicas preparaciones en altura, él hacía rodillo y salía a correr. Mientras el resto competía en Dauphine/Suiza para afinar la preparación, él comenzaba a rodar. Se está hablando muy poco de esto.
¿Cuál hubiese sido el resultado si hubiese sido Vingegaard el que se tiene que tirar todo el mes de mayo sin andar en bici?
Veremos cómo plantea el año que viene, pero yo creo que a Pogaçar le ha afectado más su fractura de muñeca, con intervención quirúrgica y semanas de reposo a 2 meses del Tour, que disputar la MSR o Flandes.
Yo creo sinceramente que no ha sido para tanto y, en todo caso, la decisión de no salir en Suiza, Eslovenia o Ruta del Sur para rodarse es completamente suya y de su equipo. En 2022 tampoco tuvo lesión y perdió igualmente. Perdió, pero ganando a todos los demás.
No ha estado un mes sin ir en bici entonces si que no hubiera hecho nada; aunque el autor del blog lo llama videojuego , pogacar ha estado haciendo rodillo en mayo. Si se baja un mes entero de la bici hubiera sido mucha tela, como para no ir al tour.
Además, el segundo Premio Zakarin™ nos indica que se pueden ganar grandes citas entrenando en rodillo.
Remco es la prueba este año. Recién bajado de la concentración de altitud, de que se puede ganar una Lieja con una pierna si es necesario.
Un cciclista profesional si está un mes sin montar en bici deja de serlo. Hacen 340 días de bici al año, hacen rodillo al segundo o tercer día de ser operados de cualquier hueso siempre que sea viable. Me imagino que la inversión que hacen en ellos es demasiada, pero no deja de sorprenderme.
Yo pensé antes de comenzar el Tour que habría más igualdad entre Pogacar y Vingegaard, lo pensé porque el esloveno hizo una primavera de ensueño, además de ganar el primer asalto de la París-Niza.
No obstante, la supuesta igualdad fue un espejismo que se rompió el día de la contrarrelol. Yo suponía que Vingegaard lo haría muy bien pues hizo segundo en la contrarrelol de Dauphine a sólo 12 segundos del ganador pero no tan bien. Por cierto decepcionante el rendimiento de Michael Berg el danés del UAE que ganó la contrarreloj de Dauphine, nadie aquí hizo ningún comentario aunque supongo que la mayoría se percató. En tiz-cycling decían que quizás era una estrategia del UAE.
Por otra parte y con lo que aún resta de temporada, mundial, clásicas de Italia, Canadá, la temporada de Pogacar va a ser muy buena pese a no ganar el tour, creo que mejor que la del año pasado, lo que demuestra que sí, se puede ser el mejor sin ganar el Tour, además, creo que Pogacar es un ciclista que aún tiene mucho recorrido y en mi opinión y aquí coincido con otros lectores debería seguir apostando por las clásicas e incluso estaría bien que hiciera algún año Giro o Vuelta.
Con respecto a Vingegaard puede que estemos ante el nuevo tirano que domine las próximas ediciones del Tour y yo creo que eso no es positivo, a los ejemplos de Armstrong (aunque éste está ya defenestrado) y Froome me remito, no obstante, parece que existen diferencias porque el Jumbo no usa el método del trenecito y porque tanto en este Tour como en el pasado hemos visto etapas muy buenas, etapas llanas donde los rodadores se filtran en la escapada, aprovechando el llano y aquí estoy de acuerdo con Sergio, por qué experimentar cuando podemos aprovechar lo que tenemos, ojalá que estemos asistiendo a un cambio de tendencia o quizás yo soy ingenuo.
Que qué ha sido de los colombianos, preguntas… Son el más claro ejemplo del ciclismo que cambia: no hay más que ver dónde están López, Quintana y Pantano.
Ya por tu nick te doy un dislike. Abrazo colega
Pero hombre, no comparemos al mejor escalador de la Historia con dos timadores como Pantano o Miguel Ángel Lopez, aunque compartan nacionalidad.
Cuidado , que los gaitas tienen muchos más drogones que los colochos
Respecto al último suelto, el Correio da Manhã es escoria hedionda, un tabloide pseudosálvame. Que sí, que hay libertad de prensa, pero es escoria.
Ah, entonces es como si Casillas intentase comprar El Mundo. Seguiríamos con el mismo problema de fondo.
No tiene nada que ver.
¿El Mundo no es escoria hedionda, un tabloide pseudosálvame?
Sí que empiezan jóvenes, aún siendo hijos de…18 años y ya un infarto
https://www.espn.com/mens-college-basketball/story/_/id/38068148/bronny-james-stable-icu-following-cardiac-arrest
Bueno bueno ya habrá sido algo genético, como la falta de escrúpulos para ganar a toda costa haciendo trampas
Un Tour más entretenido que los últimos años.
Hipocresia en los medios sobre Vingegard, cuando después de la crono de la PBF todos mudos
https://youtu.be/VoAnLHSLHGQ
Una reflexión, Lo de Pogaçar es increible desde el punto de vista de que está batiendo records de subida de Pantani y que en las crono está ganado a los mejores croners del momento. ( En el contexto Tour, etapas de 4 y cronos de 30 min).
Jonas le supera en todo, Pogaçar va mejorando año a año, pero hay uno que es todavía mejor, como conclusión no debería primar el Tour. Lo mejor es que irrumpiera Ayuso, lo preparen para Julio y le dejen ir con su calendario de clásicas Giro y Vuelta.
Puede ir intentandolo en años venideros, veremos si le dejan los UAE.
” luminosidad constante” me encanta 🙂
En cuanto al dopaje, ciclismo que cambia o simplemente marcianas, soy consciente que no se puede convertir un burro en un caballo pero ¿ Hace cuanto que un frances no gana un tour?
Gracias
pues camino de las tres décadas
Son 4 décadas, Hinault 1985
Camino de cuatro décadas… Hinault, 1985
Exactamente nueve años, el ganador legítimo del Tour 2014 fue Péraud.
En lo que a mi respecta el vinagres comedor de arenques es un monstruito en toda regla. Toda la mass media blanqueando al personaje como el vomitivo reportaje de as, hablando de su récord humano en cuanto a capacidades w/kg. Nada nuevo bajo el sol, el tour ha sido siempre el circo de los monstruos, pero de este tipejo que de juveniles era poco más que un gregario no me creo nada y entra en el mismo saco que Riis, Landis y Froome.
Es algo tremendo. El blanqueamiento de un monstruito para crear una narrativa y vender el Tour como una batalla de 2.
Algo que se empezó a fraguar a partir de 2021, cuando el Jumbo vió que con Roglic ya no le daba para ganar la ronda francesa y Vingegaard estaba lejos del nivel de Pogacar.
Se han sacado de la manga a un corredor que en juveniles estaba desaparecido y que penaba en el Tour del Porvenir, con la excusa de las marginal gains y el VOMax (ya desmentido por su propio equipo)
Y algo que me he dado cuenta también, que son los fans de Van der Poel los que más apoyan al monstruito danés en pruebas de 3 semanas.
En el programa de youtube “the move”, de Lance Armstrong y George Hincapié, que está bastante bien por cierto, han entrevistado a Chris Froome, que dio un dato muy revelador. Según lo que a él le llegó, Vingegard pudo hacer 7,5 watios por kg durante 14 minutos. Bien, pues él reconoció que en sus mejores tiempos esos watios hubiera sido buenos en 5 minutos.
Ahí os lo dejo.
Como dijo el otro: los récords están para batirse.
Una tertulia digna de una peli kinki de los 80, por cierto.
lo dice el tipo que aumento de 500 watios a 1000 watios en el Ventoux sin levantarse de la bici. Vaya un caradura que cobra 5,5 millones de euros al año porque aun le gusta el ciclismo… si le pagasen el salario minimo seguro que ya estaria cansado y que habria tenido una carrera muy larga y muy fructifera
Si extrapolamos esos datos a la contrarreloj de Pogacar y con el tiempo que perdio, podríamos afirmar que novio 7vatios/kgrs durante 14 minutos de forma aproximada? Todo en orden, tambien lo dejo ahi.
Menudos 3 ciclistas de leyenda …en fin.
A día de hoy, Vingegaard sube más en montaña que el mejor Pantani y rueda en crono como el mejor Indurain. Un corredor de otra EPOca, sin duda.
Vingegard va a la Vuelta para perder y así parecer humano y rebajar la presión de la marciana da que hizo y las sospechas que levantó.
Gracias Sergio por el seguimiento del Tour y estos análisis.
Ha sido un gran tour, pero lo mejor de lejos ha sido el blog y los comentarios de los lectores.
Espero que hagas algún seguimiento aunque sea cada 3-4 días en la vuelta.
Si no la gana Roglic, la gana él.