Los que siempre fracasan en la Milán-Sanremo

Roelandts
Jurgen, corre con tu auténtico maillot

Jurgen Roelandts terminó quinto el año pasado en la Milán-Sanremo, que tal y cómo fue a la carrera significa que fue cuarto en el sprint más importante del año. Batió a Sagan, a Matthews, a Cort Nielsen, a Colbrelli, a Stuyven, a Kwiatkowski, a Modolo, a Van Avermaet y a Viviani. Para que nadie piense que fue un accidente, en 2016 fue tercero, pero también habrá el que diga que ese año hubo caída, o que se remolcó de un coche, como todavía dicen los de siempre del que ganó.

Roelandts tiene 33 años y este año ha fichado por el Movistar, un equipo que tiene como mejor puesto en la carrera un cuarto puesto conseguido por casualidad por un corredor que jamás volvió a hacer nada ni remotamente parecido -y son 40 años de historia de la franquicia-, y que hace poco se pavoneaba en redes sociales de salir por primera vez en la Het Volk. Acabaron tres corredores.

Nadie va a descubrir al equipo navarro hoy en día. Si acaso, cómo se refocila en su miseria. Para acompañar a Roelandts van a llevar a Valverde -capaz de lo mejor en la carrera, pero tiene que ir bien colocado cuando se produzca el salto-, a Barbero -un corredor que desaparece por encima de los 200 km-, a Bennati -38 años-, a Lluis Mas, al exciclista Betancur y a Mikel Landa, el que lleva sin acabar una carrera desde los Campos Elíseos de París, hace ocho meses. Y es de la partida en una prueba de 294 km.

Supongo que a Roelandts lo ficharían con una misión específica bien evidente en un equipo orientado siempre a las vueltas por etapas, pero lo de esta alineación de Sanremo es una humillación. Es coger lo peor que tienen en el equipo (¡un saludo a la Mascota!) y ponerle un dorsal con un ¡hala!, a no caerse y llegar todos a meta, que el lunes empieza la Volta y ahí está nuestra afición.

El caso contrario a esta actitud vital es el del Mapei-Quick Step. Desde 1994 llevan intentando ganar la carrera y solo lo han conseguido en dos ocasiones: en 2003 con Bettini (y Paolini), y en 2006 con Pozzato. Dos veces en veinticinco años para un equipo que suma victorias a decenas todos los años, incluyendo el Mundial de Lisboa 2001. En la eterna aspiración han fracasado corredores como Museeuw, Bartoli y especialmente Boonen: los mejores de su generación.

Viviani
Esto lo entiende hasta un ciudagramo

El sábado salen como máximos favoritos. Tienen a Viviani de tricolore si se llega al sprint, y a Richeze de lanzador. Se pueden jugar la partida en escapadas con Stybar, Gilbert o Lampaert, y tienen al máximo favorito en la vigilia, ese Alaphilippe que en 2018 se sacrificó por el ridículo sprint de Viviani, último del pelotón delantero, con las piernas paralizadas.

Visto que en la Milán-Sanremo están prohibidos los ataques desde lejos, incluso desde cerca en sitios como la Cipressa -y encima dejan en casa a Jungels, alguien que podría lograr la hazaña-, desde hace muchos año la única duda existente en la carrera es si llegará el salto en el Poggio, o habrá ese sprint masivo que aborrecen los que dicen amar el ciclismo, como si hubiese muchas oportunidades a lo largo del año de una gran victoria de esa manera.

En la lista de los posibles atacantes en el Poggio está Alaphilippe, y en la misma situación dentre del equipo que Sagan, algo comentado recientemente aquí. Van Avermaet, sin sprinter en el equipo, también sería de la partida, pero jamás se la ha jugado en la subida y prefiere esperar a sus reducidas opciones en Via Roma. Los tres se adecuan sobremanera a los preceptos del titular del post, y sin embargo siempre están entre los favoritos.

Quien no lo estaba el año pasado fue Nibali, autor de una cosa excepcional y difícilmente repetible. Este año ha hecho mejor Tirreno-Adriático, y ni por esas está en la quiniela. Como Bardet, que evidentemente no sale para apoyar a Naesen o las escasas opciones de Venturini. ¿Nibali ayudando a Colbrelli? Aunque en sus tiempos fue un magnífico gregario (ganó el Giro con Di Luca y con Basso) su orgullo de campeón le impedirá ir de secante en el Poggio, y todo lo demás le impedirá repetir lo de 2018.

Modolo
Modolo, toda una vida viviendo de un cuarto puesto

Tras ellos viene Matthews, otro que repite aproximación stealth a Sanremo, tras haberse caído en Het Volk. Con él, se esfuman todas las opciones del muy en forma Dumoulin (4º en Tirreno-Adriático), que ya ha dicho que no va intentar irse solo. Pues si no lo hace él, que lo haga Kragh Andersen, muy activo en Algarve (2º) y desconocido en Tirreno.

Matthews carece de punta de velocidad para ganar en un sprint masivo, pero en Richmond 2015 -demasiado lejos ya- demostró que puede ganar a todos si se dan determinadas circunstancias, pero tienen que ser todas y a la vez, incluyendo errores de sus rivales. Es la razón principal por la que le sigue faltando un gran triunfo, a pesar de ser año tras año de los mejores corredores del pelotón.

Miren si no el caso de Kristoff, que no se baja del top-five de la carrera desde 2014 (1-2-6-4-4), y al que este año le han puesto al lado a Gaviria, uno que en Sanremo sueña con llegar a esos resultados. Va a resultar curioso ver quien lanza a quien en la meta, a pesar del aparente buen entendimiento en las carreras pérsicas. Otro excampeón y que va con un delfín (Stuyven) es Degenkolb, sin muchas opciones salvo carrera muy dura, mientras que Demaré va con un bloque íntegro para el, pero que en Paris-Niza ha estado muy detrás: individualmente y como bloque.

En el apartado de excampeones falta Kwiatkowski, dejado en casa por el Sky que acude con Moscon -abandonó en Tirreno porque le dolía la tripita- y Rowe, y este vale para compensar todo lo demás. Ewan tiene difícil repetir la sorpresa del año pasado, porque el Lotto es otro equipo que se adecua perfectamente al titular, y tiene muchos más visos la candidatura de Trentin, que ha ocupado su lugar en el Orica, y se supone que también su tratamiento.

Bonifazio y Cimolai viven en gran parte de lo logrado hace unos años -como Modolo, como Lobato-, y es vender humo, un capítulo aparte en el caso de Bouhanni, que se quedó fuera de control en la CRE de Tirreno y que puede minar las opciones de Laporte. En todo caso, todos los citados tienen más visos de llegar en el grupo cabecero que Groenewegen, un corredor con serios problemas en las subidas: en Katusha lo han tenido claro y dejan a Kittel en casa, porque para el papelón de 2018 mejor llevar a cualquier otro corredor.

Queda, por último, el Astana, construido en torno a Cort Nielsen -ni siquiera traen a Lutsenko o SMS Sánchez- y del que todos sabemos que no defraudará. Por el numerito de Paris-Niza, por su nacionalidad, y porque ya ha sido top-ten. El Astana jamás ha hecho nada en la carrera, pero si han conseguido hacer del sprinter del Caja Rural Peio Bilbao un escalador, todo se puede esperar.

Y, sin lugar a dudas, fracasarán en la Sanremo todos los corredores que sin opciones en el sprint y sin líder para el que trabajar prefieran el anonimato del pelotón a las serias opciones de repetir una hazaña como la de 1982 con Marc Gómez. Ya que Lotto no lleva a Wallays, habrá que confiar en Nils Politt. Porque la Sanremo es la mejor carrera del mundo en los sueños de cada uno.
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No dejo de pensar que esta noticia está relacionado con la oleada de triunfos del Astana. Pan y circo previos, para mantener a la población entretenida.
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Todas estas noticias dan pena, porque se creen que el evento va a ser seguido por “190 países”.
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Un periodista de investigación del periódico ultra El Confidencial se lamenta públicamente porque ha hecho un reportaje que le ha costado mucho (“dos meses”) y no ha estado ni entre las diez noticias más vistas del día en el medio en el que trabaja. En serio, es así. ¿A qué parece de llorón profesional? ¿A qué es de llorón profesional, antes conocido como periodista? Por cierto, en la otra noticia con la que se compara, también está implicado un fraude eléctrico: el instigador del asesinato se dedicaba a pinchar tendidos para abastecer invernaderos industriales de marihuana. Usted se preguntará que hace este suelto aquí, y yo se lo digo: lo del periodismo, y la calidad de las personas que trabajan en el mismo, es de frenopático.  De siempre ha sido un tema transversal de este blog.
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(Spoiler: trabaja en un medio de comunicación donde meten publicidad de marcas camuflado como noticias. Life comes at you fast)

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¡Qué interesante! ¡Y qué idea tan original, copiada del NYT o Guardian! Hace muchos años que llevo escribiendo aquí que los periodistas acabarían vendiendo baterías de cocina puerta a puerta, y ya casi están…Ojo a iniciativas similares con Juanma Castaño enseñando clínicas de injertos capilares en Turquía, Hainara Ernando librerías anticuarias en Bloomsbury, o yo mismo los primeros hornos Bessemer de Valonia combinando con la Lieja y la Flecha.
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Veré la Sanremo en una #tertulia2005, me han prometido que no sintonizarán la Tele del Cinismo. A ver, que me pueden joder la carrera que más me gusta del mundo.

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52 thoughts on “Los que siempre fracasan en la Milán-Sanremo

  1. No descartes a Nibali, Fignon ya repitió triunfo el 89 después de ganarle al sprint a Fondriest! en el 88

     
    • La inteligencia de Fignon en las carreras que no le iban NADA! No la ha heredado nadie!

       
      • Qué corredorazo, pero como en España lo tildaban de malo y perverso tanto que nos perdimos. A mí, por la variedad de su palmarés, me parece de los destacados de la zona B de históricos del ciclismo.

         
        • El problema de Fignon fueron sus lesiones que hicieron que desapareciera incluso un año entero.
          Es sin duda uno de los mejores B, y cuando brillaba, no he visto a nadie como él. Entendía el ciclismo, tenía inteligencia para desarrollarlo y cuan tenía piernas se colocaba en el nivel A

           
          • Fignon fue grandísimo. Lo que ocurre es que en España le tenían manía por lo del escupitajo y siempre minimizaron su valía.
            Una lástima sus numerosas lesiones: se pasó en blanco unas dos o tres temporadas.
            ¿Habéis leído “Éramos jóvenes e insconscientes”? Muy fan del libro. Aunque yo soy fan de todo lo que tenga que ver con el equipo Renault, que me enamoró en la famosa Vuelta 1983.

             
            • El quinto tour de Hinault sucedió por dos razones: Fignon no corrió en 1985 y Lemond era de su equipo , La Vie Claire. En el 84 le Fignon le dio un repaso al caimán como pocas veces se le ha dado a uno de los grandes

               
              • Totalmente de acuerdo. La victoria de Fignon el el Tour 84 fue aplastante, incontestable, con cuatro o cinco victorias de etapa. Todo iba encaminado a un dominio de Fignon en los siguientes años, pero las lesiones le lastraron casi para siempre.
                Y lo del Tour 89…Debió ser suyo. La innovación tecnológica de Lemond en las cronos no debió ser permitida.

                 
                • Y no olvidar que el giro 84, se lo robó un helicóptero en la última crono a favor de Moser

                   
                • En ese Tour del 89, esa última crono en su casa, no puede ser mas cruel a veces la vida! Siempre he pensado que ese dia se le empezaron a malignizar algunas celulas…pobrecillo, ese caracter que tenia era un tesoro para un ciclista profesional, pocos corredores he visto en mi vida que hayan gustado tanto como él!
                  Descanse en Paz

                   
                • Vaya recuerdos! La crono final del Tour 89 con Fignon al suelo, es la primera imagen del ciclismo de la que tengo memoria, igual miré otras carreras antes pero aquel día es el primer que vi ciclismo.

                   
    • Greg Lemond nunca debió ganar el Tour del 89. Debió ser descalificado tras la crono del último día en París. El manillar de triatleta no estaba homologado por la UCI. Corregidme si no es así pero es como lo recuerdo.

      Un tio con los cojones muy grandes.

       
  2. Una pena que Roelandts se haya pasado a esa banda. Su sprint en 2016, aprovechando la confusión y arrancando con fuerza desde el inicio de la via Roma, fue magistral, salvo por el hecho de que le faltaron 20 metros.

    Yo confío en Kristoff. La Milán-Sanremo es una carrera que acaba eligiendo a sus ganadores y el noruego tiene el sprint largo y de potencia sostenida que permite victorias en via Roma.

     
    • Kristoff está pasando desapercibido como corredor, y es un corredorazo con dos Monumentos, una medalla olímpica y una plata mundial

       
      • A mí también me lo pareció aquel par de temporadas, pero es que después lleva tres años a base de etapas en Omán, Noruega y Francfort…

         
        • Ya…ha mantenido muy buen nivel en Flandes y Sanremo…y la plata en Bergen, y el triunfo en los Campos Elíseos en 2018

           
  3. Si he contado bien, en 46 de 109 veces ha entrado destacado el primero del segundo (42%) … y esto sin contar las veces que han llegado grupos reducidos (de las que yo he visto en 2003, 2017) o que la diferencia entre el escapado y el segundo fue menor a un segundo (2006 – Pozzato). Para los que dicen (periodistas que repiten sin contrastar) que es la clásica de los sprinters.

     
    • De hecho, el primer sprint masivo en Sanremo fue en 1997, con el primer triunfo de Zabel…y en 1993 los organizadores y periodistas ya estaban espantados de que el segundo puesto se decidiese al sprint….

       
      • Lo que es un claro indicador de las distintas formas de correr entre antes y ahora es que, a pesar (o precisamente por lo mismo) de ir acumulando dureza en los últimos años en la parte final con la inclusión de Cipressa y Poggio, es en los últimos 20 años cuando mayor proporción de sprints “masivos” ha habido, reforzando la teoría de que concentrar la dureza en la parte final lleva a correr a la defensiva en vez de favorecer el ataque.

         
        • Creo que tu análisis está equivocado de raíz. La Cipressa se mete en 1982, los sprints masivos empiezan en 1997, y son básicamente por la difusión masiva de la EPO. Allí donde antes solo pasaban tres o cuatro corredores, empezaron a hacerlo cuarenta o cincuenta. Con el mismo recorrido.

           
  4. “El Astana jamás ha hecho nada en la carrera, pero si han conseguido hacer del sprinter del Caja Rural Peio Bilbao un escalador, todo se puede esperar”, no, no todo es posible. Un sprinter puede ser lo que quiera, un escalador no.

    Esta es la de Sagan.

     
    • Peio en la vida ha sido sprinter para mi un corredor muy parecido a Jesús Herrada pero sin tanta calidad en las cronos ( excepto estos años Astana…que ha destacado de sobremanera dejando a Herrada un escalón o varios por debajo, y el croner era Herrada)

       
  5. Mathews lleva decepcionandonos mucho tiempo. Su tiempo, si es que alguna vez lo hubo, ya pasó. Difícil apostar a algo que no sea la victoria de un quickstep o un Astana

     
    • Pues para estar decepcionando tanto, el año pasado se ganó un par de clásicas WT pasándole, con perdón, la chorra por la cara a Van Avermaet.

       
      • Ya, pero ganar a Van Avermaet…hombre…también es triste que todavía hoy los mejores triunfos de Matthews sean esas dos pruebas en Canadá, que serán WT pero son un poco como de chichinabo…

         
  6. Un apunte personal sobre la carrera. No sé si es la mejor carrera de un día del año, pero está cerca. Por distancia, recorrido, final. Hay varios elementos que la hacen única. Como es una carrera con cuestecillas, los capos, la puede ganar un sprinter fuerte. Es una delicia, al menos para mi, ver los grupos de corredores ir quedándose en un capo, e intentar enlazar en el siguiente. Es una delicia ver la cabeza del grupo ir a una velocidad increíble por esos mismos capos, y luego bajarlos. Descubrir en el Poggio los favoritos que de repente aparecen en cabeza. El descenso del Poggio, con los atacantes en la subida bajando dejándose todo por aumentar su exigua ventaja. Una delicia ver los kilómetros llanos del final, con la lucha entre el pelotón y los escapados. Y un goce total ver el mejor sprint del año, si al final se produce, o el éxtasis del fugado David que ha podido con los Goliat a 70 por hora. Una carrera imprescindible que no se parece a ninguna otra. No tiene pavés, ni sterratos ni bergs, ni cotes, no se desarrolla dando vueltas por carreteras rurales entre barriadas de pueblos pegados unos a otros, es una carrera entre Milan y San Remo, nada menos que 300 kilómetros desde el corazón de Lombardía hasta el Mediterráneo, algo así como una Madrid- Valencia, recorriendo un paisaje extraordinario. Solo la maravilla que es la Paris-Roubaix, con sus llanuras, pasos por bosques, caminos carreteros, enlace interior de pueblos agrícolas y mineros, puede hacerle sombra. Solo que el pavés, con lo fotogénico que es, no es ciclismo al cien por cien, tiene algo de artificial, de impostado, de imponer dureza. Me encanta, pero lo veo así. En mi particular opinión, claro.

     
  7. Tal y como está el bueno de Julian, va a ser su ataque en el Poggio el que decida esto yo creo. Quienes sigan esa rueda se jugarán la victoria en vía Roma. Yo diría que ni Sagan ni Valverde están en la forma suficiente para hacerlo, aunque con estos dos tipos nunca se sabe. Y si ellos no van… es que se me hace difícil ver otro que consiga engancharse a esa rueda. ¿Nibali? ¿GvA? Interesante

    Y yo, en caso de que se resuelva al sprint, también apuesto por Quick, es decir por Viviani. Yo le estoy viendo como un tiro en el inicio de temporada y me parece, a día de hoy, el más rápido. Claro que como bien sabemos todos, este no es un sprint cualquiera. El sábado saldremos de dudas.

    Un saludo a todos.

     
  8. Hace tiempo que leí un post tuyo en el que decías algo parecido a que cuando éramos niños mediamos nuestras “hazañas en la bici” en la distancia que nos alejábamos de nuestras casas, para después analizar la carrera de 300 km de la Milan-Sanremo. Me sirvió para dar mayor importancia a las clásicas de primavera, y cada año le dedico menos tiempo a las grandes vueltas, vamos, que espero con ansia es pistoletazo de salida la Milan-Sanremo.
    Gracias por tus textos, son un gustazo.

     
  9. Son muchos años apostando por Sagan y apetece variar de decepción este año. En la encuesta he votado “otro” y ese otro será Dumolin.

     
  10. ¿Qué demonios pretende Movistar que haga Landa en MSR? ¿Preparar la Volta? Es que no me entra en la cabeza lo de este equipo y las carreras de un día.

     
  11. Pues ojo con Betancour que está cogiendo un cuerpo de sprinter…bueno igual más de halterófilo, jejeje

     
  12. Aunque el equipo de Movistar para MSR de asco veo a Valverde con muchas opciones. No necesita nada más que seguir la rueda de Alaphilippe, que seguro atacará en el Poggio (quick steep jugará esta baza y la del sprint masivo con Viviani), si el ataque tiene exito y llega un grupo de cuatro o cinco corredores lo tiene hecho.

     
    • Sí, si Valverde está bien colocado en el Poggio cuando se produzcan los ataques y consigue llegar un grupo reducido, tiene todas las de ganar. Eso sí, no es lo mismo ganar un sprint a Woods, Bardet y Dumoulin que a Van Avermaet, Sagan o Kwiatkowski, otros que podrían ir en ese grupo.

       
  13. Disculpadme, pero sabéis desde que canales gratuitos o por streaming, y en ese caso desde que hora, se puede ver? Muchas gracias

     
  14. He leído bastante a Valverde por los comentarios, pero sinceramente le veis alguna opción? Yo no, porque veo muchas maneras posibles de perder. Su única opción pasa por llegar en un grupo reducido, lo cual es muy difícil, y más contando con que se meta (es capaz de entrar mal colocado en el Poggio, y entrando bien, capaz de que no seguir el ataque de Alaphilippe). Y si todo eso ocurriera de manera positiva para él, no sé si le llegaría para ganar un sprint en llano (sin que pique para arriba aunque sea ligeramente) a los que probablemente podrían llegar con él: GvA, Sagan…

    La prueba son los Mundiales, solo ha ganado en el que no ha tenido que pensar en ningún momento (aguantar, aguantar, y ganar al sprint).

     
      • Para mí hay cosas más sangrantes que este Mundial, pero también valdría. El ciclismo que cambia.

         
      • Y si Alaphilippe gana sprints en llano, todo puede ser. Por kilometraje, la MSR se acerca a la idea las primeras competiciones del ciclismo: poner a prueba la capacidad agonistica de los participantes; en el S.XXI se miden los avances médicos, principalmente.

         
  15. Respecto a lo del tipo de El confidencial, es de traca. Aunque ciertamente es curioso, yo mismo he hecho mis pinitos como juntaletras y algunos de mis escritos más leídos y celebrados me llevaron una tarde, mientras que otros que me costaron meses de investigación los leyeron cuatro gatos. Vale, y qué? Estoy más orgulloso de los últimos que de los que llegaron a portada de Menéame y similares. Dice mucho del oficio del periodista actual que se lamente de que no lo lean, como si los clicks fueran la prioridad, el clickbait el modelo a seguir.

     
  16. Puesto que San Remo es la clásica que en teoría menos le va a Alaphilppe y acaba de llevarse la Victoria, crees que estamos ante un corredor que pueda ganar el mismo año San Remo, Flecha, Lieja y Amstel? Visto el estado de forma suyo y de su equipo…no me sorprendería!

     
  17. Y por segundo año consecutivo, la primera verdadera carrera del año, resulta ser la mejor de toda la temporada. y es triste decirlo porqué, ya sé que no veré una carrera mejor que esta durante los próximos 7 meses, a pesar de que seguiré pasando muchas tardes pegado a una pantalla pendiente de alguna hazaña ciclista….

     

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