Heliocentrismo

Duró muy poco la esperanza de la etapa de Le Lioran. Pogacar ha ganado las dos jornadas de los Pirineos, y de nuevo todo el ciclismo vuelve a orbitar en torno suyo. Un Rey Sol cruel que abrasa todo lo que le rodea, incluyendo el pasado y parte del futuro, y donde ya es inútil buscar adjetivos.

El adjetivo, en todo caso, es el refugio del pseudoescritor. Aquí lo que cuentan son los números, y han sido muy concluyentes: se irá desgranando a lo largo de este escrito, pero quédense con que vamos camino de la edición más rápida del Tour de Francia con una media de 42,628km/h en la dos primeras semanas. En total consonancia con lo que viene siendo la temporada de los records batidos y los registros inhumanos, reflejo, sin duda, de la buena salud de este deporte.

El sábado se había programado una llegada a Pla d´Adet, con motivo del 50º aniversario de su primera ascensión.… Leer más

El miedo cambia de bando

¡Pogacar! ¡Campeón del Giro con seis etapas ganadas! ¡Pogacar! ¡Incontestable líder del ciclismo que gana de febrero a octubre! ¡Pogacar! ¡Polivalente corredor que gana clásicas centenarias, recién creadas, vueltas por etapas, al sprint y en montaña! ¡Pogacar! ¡líder del Tour 2024 ya en la segunda etapa, e ininterrumpidamente desde la cuarta! ¡Pogacar! ¡Temblad!

Siendo todo esto cierto, todo, la realidad se empeña en ser terca y difícilmente manipulable. Pogacar es el Rey Sol, el corredor en torno al cual gira todo el ciclismo contemporáneo, pero Pogacar no es el mejor corredor del Tour de Francia. Tan pronto como se asuma, y los hechos están ahí, menos sufrimiento habrá por parte de sus seguidores.

La etapa de ayer pasará a la historia del ciclismo. No me gustan mucho estás hipérboles, pero cuando hay que usarlas es en días como el de ayer. Y pasará porque, como vengo insistiendo en este modesto espacio desde hace tiempo, la rivalidad Pogacar-Vingegaard lleva tres Tour de Francia consecutivos, y este en disputa.… Leer más

¿Son suficientes 1´15″ de ventaja? No

Ya ha pasado la mitad del Tour de Francia, y la diferencia a favor del aspirante sobre el vigente campeón es de 1´15″. Habrá quien considere que es apreciable, significativa o suficiente, y lo hará porque es Pogacar el favorecido, otro cuento sería si la diferencia fuese a favor de Vingegaard.

Pogacar es el que ataca. Me gusta hasta como definición, la verdad. Sus numerosos ataques, de los que hay un buen resumen en los dos últimos Tour perdidos o, sin ir más lejos, ayer mismo, raras veces producen algo en el Tour, salvo el entusiasmo de los comentaristas, exactamente igual que pasaba con el Clembutador post-sanción por dopaje.

Ataques que no van a ninguna parte, pero que lo intenta. Ajá. La actitud que se espera de los ciclistas, y que Pogacar interpreta de manera admirable y excesiva. A los hechos recientes me remito. Mitad del Tour consumido, únicamente un gran puerto subido, y la ventaja de Pogacar es de 1´15″.… Leer más

Mañana empieza el Tour

Dentro de las paradojas del ciclismo, es una burla que por cuarto año consecutivo el Tour de Francia se presente como un duelo entre Vingegaard y Pogacar. Ya no hay precedentes de tres Tour seguidos donde el primero y el segundo hayan sido los mismos corredores -con alternancia entre ellos-, como para tener que asumir un cuarto año con el mismo panorama.

Y, sin embargo, es así. Pogacar se presenta en la salida de Florencia como máximo favorito (incluyendo declaraciones fuera de tono sobre su estado de forma, matizadas al día siguiente con un Covid que nadie se cree), impulsado por sus propios números, y también por la legión de fans, atraídos por su indudable talento y por su carisma.

Pocos se acuerdan las opciones reales de Vingegaard, que ya fue el mejor en montaña en el Tour 2021, y ha derrotado claramente a Pogacar en el Tour 2022 (en montaña) y en el Tour 2023 (en montaña y crono).… Leer más

Roglic porque lo merecía

Ayer acabó un Dauphine pésimo, horrible en gran parte de los valores evaluables, y rescatado en el último momento por un final emocionante, en gran parte inesperado, pero que no compensa ocho días de competición especialmente descafeinados.

La carrera francesa, a veces bautizada como miniTour de Francia, tradicionalmente servía de prueba sobre los estados de forma de los aspirantes a la gran cita de julio; de aquí salieron burbujas como la de Iban Mayo, por ejemplo, y también trayectorias telegrafiadas como la de Wiggins y su trenecito, por poner únicamente dos ejemplos.

Este año poco se puede decir al respecto, dado que ni Vingegaard ni Pogacar han salido en la prueba, y que el resto de meritorios para el Tour de Francia han mostrado un nivel que únicamente arroja dudas sobre sus posibilidades reales, si las hubiera o hubiese.

Y después está lo otro, lo de siempre en el ciclismo.… Leer más

Una carrera muerta buscando a sus muertos

Que la Vuelta al País Vasco es una de las peores competiciones del WT era algo bien sabido. Una prueba sin identidad, más allá de los caminos estrechos, el público en las cuneta, y la obsesión maniaca con Eibar y esa subida final que no decide nada, como no deciden nada las etapas previas.

Este año el recorrido era aún peor de lo acostumbrado, y únicamente salvaba la prueba una muy buena participación en cuanto a aspirantes al triunfo final; después de lo sucedido ayer, es muy probable que ninguna estrella del pelotón de la actual generación se acerque por las carreras de Euskadi en muchos años, ante el grave riesgo de una caída o de perder la vida.

Les sobran los motivos. La carrera y la organización local ya tenía precedentes espantosos, como esa moto que derribó a Van Avermaet en una Clásica de San Sebastián cuando iba solo a por la victoria, la casi muerte de Milan Vader hace dos años, o las graves secuelas físicas para Sergio Pardilla en una caída de 2015 atribuible a la organización; esto, por citar únicamente los casos más llamativos.… Leer más

Tres prólogos para condicionar una cosa ya sabida

Las carreras de Flandes tenían antaño una identidad marcada y diferenciada; por ejemplo, en Waregem no salía ningún favorito para “De Ronde” (La Vuelta, sic) porque era considerada una carrera menor, y con razón. Ahora, metidos de lleno en la vorágine de que todas las carreras de un día son “clásicas”, que todas tienen valor intrínseco, nos topamos con que esas carreras han condicionado el Anillo -un licencia de traducción con Ronde- Único ideado por Flandes Classics para dominarlos a todos.

Hasta una carrera como Gante-Wevelgen, que este año ha vuelto a refrendar su condición de Sexto Monumento, también ha quedado subsumida y devaluada: todo se corre como condición para Flandes, como preparación para Flandes, y con Flandes en mente. Es algo consentido por los organizadores -que es el mismo para todas las carreras-, la UCI y el aficionado, y todo se vende como necesario para el espectáculo, lo haya, hubiera o hubiese.… Leer más

Lo anormal se ha vuelto normal

Poca emoción y poca sorpresa en la presentación del recorrido 2024 de la Vuelta a España; sucedió ayer, con nulo eco mediático -la gente está a otras cosas en estas fechas, y coincidió con jornada de Liga- y desinterés generalizado, salvo en los poblachones donde Guillén sablea la arcas públicas, a cambio de la promesa etérea de miles de millones de espectadores.

Lo de siempre, vamos. Y así también con el recorrido, donde el mandamás de la Vuelta ha cercenado con lo que el considera “etapas de transición”, reducidas de manera muy optimista a solo una, y en la primera semana, quizás por el mal recuerdo de la etapa con final en Oliva de este año, donde el pelotón se fumó la jornada, y casi gana un Caja Rural dopado: acabó ganando un sprinter barbudo del Cofidis con 35 años y nulo palmarés.

Es la Vuelta. Si el organizador se empeña en que el problema son las etapas llanas, el problema subyacente de su producto va a seguir vigente.… Leer más

El mejor ciclista del año otro año más

Parecía que era el año en que se presentaba con más dudas, y Pogacar ha vuelto a cumplir con su cita anual en Lombardía. Tres participaciones, tres victorias. Además, la victoria del pasado sábado ha sido aún más incontestable que las dos precedentes.

La carrera no tuvo mucha historia. Es el Lombardía, una carrera para especialistas donde es habitual encontrar a gente que repite victoria, incluso entre gente no especialmente ganadora: vienen a la cabeza los ejemplos de Cunego, J. Rodríguez o Nibali. Que gane un corredor como Mollema -curiosamente, tampoco un gran ganador- o Pinot -ídem- es la excepción.

Pogacar ha encontrado en la carrera un coto particular donde incluso se ha permitido ganar en solitario, atacando a 32 km. de meta. Si en 2021 le había acompañado hasta meta Masnada -jamás se ha vuelto a ver en una así- y en 2022 Mas -jamás se ha vuelto ni volverá a ver en una así-, esta vez el campeón esloveno quiso despejar todas las dudas de una manera concreta y voraz.… Leer más

Lombardía para todos

Este año Lombardía no será una revancha de Mundial, disputado hace dos meses y ganado por un corredor que pasó anónimamente por el Tour, y que desde que obtuvo el triunfo ha competido en tres carreras. Sí, ya ha acabado la temporada. Hace semanas.

Tengan esto en cuenta cuando les hablen de las bondades del Mundial en agosto, ese que se va a disputar cada cuatro años. Lombardía ha vuelto a quedar como una carrera deslavazada, incidiendo en su carácter de prueba de prestigio, pero rara y, desde luego, el menos prestigioso de los cinco monumentos.

El año pasado tuvo un seguimiento exagerado por parte de los medios españoles. Se retiraba 18.- Valv. (Piti) y una súbita pasión por el ciclismo, y por esta carrera en particular, atenazó a los propagandistas y a los supuestos valedores de este deporte. Un año después, no queda nada de eso: ni el murciano al que nadie extraña -nadie-, ni el interés por una carrera en la que hace tiempo que no suceden sus famoso aguaceros, niebla o mal tiempo.… Leer más