El oligopolio de la París-Roubaix: un duelo a dos

Gladiator
Gladiator, Espartaco…: Roma siempre gana

Lo procedente en este caso es empezar recordando el titular para el reciente Tour de Flandes: “no es un duelo a dos”. Aún dentro de lo previsible, en el palmarés de los últimos diez años de la carrera de los muur, Cancellara se ha llevado tres ediciones, por otras tantas de Boonen. Las otras cuatro han ido a parar a Devolder (2), Ballan y Nuyens. La París-Roubaix es otra historia.

A mí me hace gracia todos esos que dicen que es la mejor carrera del mundo, cuando siempre ha sido una carrera para especialistas. Por ejemplo: Wiggins será el primer ganador de un Tour de Francia que tome la salida desde que LeMond lo hiciese por última vez en 1994. Mientras en las grandes vueltas todo el mundo tiene cabida, en la París-Roubaix sólo caben obsesionados con la carrera -y no necesariamente ganadores, recuerden los casos de Ludwig, Hoffman, Peeters o Flecha, que sólo vivían para este momento del año- y gente que va obligada.

Esto es así, y el que presente una realidad más edulcorada esta mintiendo: no puede ser la mejor carrera del mundo cuando presenta ese déficit de participación, aunque mejor sería llamarlo sesgo. Es espectacular, tiene momentos decisivos lejos de meta, es una rareza jurásica que ha sobrevivido de milagro, pero no es la mejor carrera del mundo: es simplemente una carrera singularísima, probablemente la única aparte del Tour que conoce el lector-Marca.

Y, por circunstancias de la historia, es un oligopolio a dos, porque al igual que en los tiempos de Moser-De Vlaeminck, han coincidido en el tiempo dos de los más grandes corredores de su historia particular. Si en el caso de la pareja italo-flamenca se repartieron entre ellos siete de las nueve ediciones disputadas entre 1972-1980, Boonen y Cancellara han hecho lo propio en el periodo 2005-2013: siete ediciones ganadas, por solo dos a cargo de otros corredores.

Es muy probable que uno de los dos se lleve la edición de este año: desempatarían en cuanto a número de victorias totales en monumentos (7), y Boonen podría quedarse en solitario como máximo especialista en la carrera, o bien Cancellara empatar con De Vlaeminck y el campeón belga en lo más alto del podio de la clasificación histórica de la prueba. El suizo, siempre que ha ganado Flandes, ha repetido en Roubaix, y el belga tiene el mejor equipo de la carrera.

¿Y quien se puede colar en este duelo a dos? Van Marcke, que de momento no ha ganado nada y simplemente ha demostrado que puede estar ahí; Kristoff, si sigue con la gasolina de octanaje superior con la que carbura esta temporada; Terpstra, tercero el año pasado y que esta año -dicen en su país- sale en igualdad de galones con Boonen (¡un saludo a Chavanel, ausente!); Van Avermaet; Stybar; Langeveld -muy fuerte en Flandes- o Degenkolb, porque si subía los muros con los mejores hace una semana, qué no hará en el supuesto llano de Roubaix.

Además, habrá que contar con el francés que siempre sale de debajo de las piedras en un día que se vive como una fiesta nacional en el país vecino (llámese Turgot, Gaudin, Chainel, Ladagnous) y ver con interés lo que pueda hacer Sagan, que este año si toma la salida en una carrera que le puede venir bien -siempre he pensado que su gran capacidad, además del sprint, es el llano, en contra de la creencia generalizada con las subidas cortas y explosivas-, el zombie andante de Leukemans y Phinney, que concluye su temporada este domingo.

La París-Roubaix es una cita obligada para todos los aficionados al ciclismo, pero es una carrera de especialistas que deja a los demás al nivel de comparsas. Me dirán que el Tour de Francia también es así, pero allí por lo menos hay etapas y cierta variedad en el día a día. Una carrera de un día donde siempre ganan los mismos, con una probabilidad del 80%, no puede ser la mejor carrera del mundo: es un oligopolio con largos periodos de duopolio. El del domingo puede ser el último del actual.
***
Ayer la subida a Arrate en la Vuelta al País Vasco, una tradición que es tradición en sí mismo, puesto que nunca pasa nada: es una subida que no marca ninguna diferencia. Contador lo intentó unas cuantas veces pero, al ver que no se iba, dijo en meta que fue por causa del viento de cara: nada humano le derrota, ni siquiera la humildad. Esta faceta de Contador nunca se había ido, porque es la que está más intrinsecamente unida a su ser, la de un hijo de emigrantes de Barcarrota (Badajoz) en Pinto.

Tan activo estuvo Contador, que se olvidó de pegarse a rueda de Valverde, que entró 2″ por delante en la meta, ambos por detrás de Wouter Poels, el buen corredor holandés habitual de los puestos 8º-10º en vueltas por etapas de prestigio, y que en el Tour 2012 tuvo una gravísima caída de la que se ha recuperado. Coronó con la suficiente ventaja para poder utilizar su corpachón en el vertiginoso descenso a meta.

Entre los damnificados de la jornada estuvo Kwiatkowski, que perdió bastantes segundos -seguramente por la fuerza malgastada en esos sprints en los que se mete- y, especialmente, el Sky, que perdió segundos con Nieve -y era su terreno- y cualquier credibilidad con el abandono simultáneo de Kennauqué y Kiryenka. El británico que viene de la pista (y, empero, es escalador) había ganando en Italia la semana antes: no se ha informado de ninguna enfermedad, aunque ha perdido minutadas en todas las etapas; el portento bielorruso no parece el mismo corredor que el año anterior hizo una aproximación a Arrate digna de un cohete espacial.
***
Robert Vrecer, el esloveno fichado por el Euskadi en 2013, positivo en la Vuelta a Polonia 2013. El positivo ha tarado en conocerse todo este tiempo, a saber por qué. Tras el ruso, es el segundo positivo entre los extranjeros fichados por el equipo vasco en la temporada de sus estertores finales. Bueno, y también está el marroquí con depresión.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
 

32 thoughts on “El oligopolio de la París-Roubaix: un duelo a dos

  1. Año tras año lo de la subida a Arrate se está volviendo más un lastre que un aliciente para la carrera. Yo creo que la subida en sí tiene atractivo, tradición y hasta cierta dureza para hacer daño pero lo que falla estrepitosamente es la aproximación, calcada año tras año. Urkaregi se sube a plato y a rueda y el falso llano desde Elgoibar a Eibar mata toda posibilidad de ataque lejano. Entiendo que la doble subida aporta público, pero podrían atreverse con adelantar el primer paso y alargar el rodeo encadenando, sin que me parezca una salvajada, Azkarate, Gorla y Asentzio-Karabieta para bajar a Eibar y terminar en Arrate.

     
    • Creo que somos muchos los que estamos de acuerdo en ello. No sería ninguna salvajada cargar esta etapa bien. Otra opción que podían explorar un día sería la de la cronoescalada. Como prólogo, el primer día, podría quedar chula.

       
      • De hecho, más que cargar la etapa sería redistribuir la dureza y eliminar los llanos camino a la última subida, que el recorrido ofrezca posibilidades al que se la quiera jugar de lejos. Asentzio y Karabieta se subieron ayer mismamente, pero a 100 y 70 km de meta poco juego pueden dar … Luego, está claro, depende de los ciclistas si quieren liarla o no pero creo que esta etapa se podría diseñar de otra forma para ofrecer un gran espectáculo.

         
  2. No sé si es la mejor carrera del mundo (ese tipo de declaraciones siempre me han parecido ridículas y sin ningún sentido), pero sí es una de las que más me apetece ver y precisamente por la razón que tu desprecias: que sea una carrera para especialistas. Que exija un grado de especialización y dedicación a sus protagonistas que ninguna otra carrera obliga. Que el hombre que destaca aquí puede no destacar en ninguna otra carrera (o en muy pocas), y viceversa, los que destacan en otras carreras, aquí se pueden hundir. Es injusto que pongas a Flecha o a Peeters, también podríamos poner a Ballerini, Wampers, Planckaert, o gente que no ganó, pero sí luchó incansablemente por hacerlo como Bauer, Van Hooydonck, Hoffman y tantos otros que le han dado lustre a la carrera, que se jugaban su temporada en dos semanas en el norte de Europa.

    Siempre me ha atraido porque ha tenido un equilibrio perfecto entre la “monumentalidad” del escenario y la competitividad de los corredores. Habrán ganado solo dos corredores, pero algunas de esas ediciones han sido memorables y lo mejor del ciclismo reciente, como el duelo a tres entre Boonen, Cancellara y la vacaburra de Ballan, o la de la persecución de Pozzatto a Boonen. Que los ganadores sean los mismos es un dato irrelevante si no se explica cómo lo han conseguido.

     
    • Bueno, tienes parte de razón: el problema de los oligopolios es que esa emoción se torna en nula cuando sabes quien va a ganar. En este tipo de carreras siempre ganan los mismos, y para mí eso es una tara.

       
      • Discrepo la mayor!!!!
        En que tipo de disciplina en que estemos hablando de máximo nivel mundial no va a destacar la “excelencia” (Mecánica, estratégica, médica, etc.)
        Coge el mundial de cualquier especialidad (hasta bólidos si quieres), y siempre tendrás un grupo de favoritos muy reducido, con algunos aspirantes q de tarde en tarde dan la sorpresa, y no por eso la champions, la F1, la NBA o el propio TdF dejan de ser espectaculares. Y sí, puede q en alguna etapa/carrera/partido algún participante menor dé el mejor espectáculo del torneo, pero hablando de deporte profesional lo q cuentan son los laureles de la victoria.

        Dicho lo cual, a mí me gusta la roubaix por esa rareza singular q la hace la mejor carrera llana (¡que no plana!) del año, donde llegado el momento ni chuparruedas ni hostias: fuerza, técnica y colocación (la parte q menos se aprecia en la tele). Claro, ahí aparecen los especialistas (igual q en las cuestacabras) pero roubaix no hay más q una!

        Así que, por lo menos para mí, este domingo HAY ROUBAIX!!!!!

         
  3. También es bonito que haya competiciones para especialistas. ¡No preferirías que Froome se presentara en todos los monumentos para llevárselos uno tras otro!

    Por cierto, ¿cuál sería entonces la mejor carrera del mundo? ¿Flandes?

     
  4. Y mientras tanto, David Brasilford abandona su cargo en la federacion britanica de ciclismo…
    http://www.theguardian.com/sport/2014/apr/10/sir-dave-brailsford-team-sky-leave-british-cycling

    Me encanta como se obvia en el articulo el nombre del actual presidente de la UCI en todo eso.

    Por otra parte, y con un poco de suerte, espero poder sacar unos minutejos libres de obligaciones familiares para poder ver algo de P-R, que tengo que animar a los de mi tropela. A ver si sale una buena carrera, sin lluvia, y gana alguien que no sea Canceboonen. Reconozco mi debilidad por Sagan pero, sintiendolo mucho, este anho no lo veo ganando en el velodromo.

     
  5. Que Roubaix sea desatendida por los ganadores de Tour no dice nada malo de Roubaix, sino de los ganadores del Tour. Induráin, Ullrich, Armstrong, Evans nunca intentaron ganarla, y tanto peor para ellos, pero no para la carrera, hombre.

     
  6. Quiero públicamente agradecer a Sergio que me haya hecho descubrir el placer por las carreras de un día. Yo fui un aficionado-Marca standard y ahora me aburren las carreras de varios días.

     
    • Bueno, gracias. Tu caso particular es bastante común, y he recibido idénticos parabienes por el mismo motivo. Ahí está el archivo del blog, yo cuando empecé con esto siempre hablaba de las clásicas -de las grandes y de las menos grandes- con el mismo entusiasmo, después han ido viniendo otros a hablar de la importancia del GP de Valonia o la París-Bruselas: por regla general, dan más espectáculo que una vuelta por etapas. Además, la historia de este blog ha ido paralela a la tecnología de emisión en streaming que ha permitido que muchos podamos ver carreras de las que antes sólo sabíamos el resultado final.

       
  7. La P-R, salvando las distancias, concita un sentimiento muy parecido al del Mundial.

    Sin perjuicio de la situación y las circunstancias que las rodeen, siempre generan un halo de misticismo y entusiasmo que hace estar hablando de ellas durante muchos días (y varios después) de su celebración.

    Que haya suerte.

    Tomelloso.

     
  8. Ayer se juntaron, la peor versión de Contador con sus múltiples ataques de peseta que no lllevan a ningún sitio, dejándose 2 preciosos segundos en meta y final en alto. Que flaco favor le hacen al ciclismo este tipo de finales

    La vuelta que la gane Valverde, por favor

    La trayectoria de Cunego también vale para hacer un estudio profundo

     
  9. No me puedo creer que se te haya olvidado comentar el brutal ataque de Samuel Sanchez en el descenso de Arrate. Espectáculo de primera, ¡menuda demostración de garra y pundonor!

    Por otra parte, sobre la Roubaix me inclino a pensar más en la línea de Nick. Creo que una carrera gana en atractivo cuando el número de corredores que juegan a ganar aumenta (aunque eso no necesariamente implique que aumente el número de ganadores). Y los especialistas ayudan a que eso ocurra. ¿Que luego gana Cancellara? Bueno, a mi eso me da igual, pero si gana, que sea sufriendo, y habiendo tenido 10 rivales que se las han hecho pasar putas de verdad. Con equipos que le han dejado sólo, con corredores que le atacan o no le pasan relevos, o lo que sea. Pero mientras haya todo esto, para mi es suficiente. Porque las carreras se disfrutan hasta que ves a los corredores llegar a meta, no después de ver en los rótulos quién es el ganador.

     
  10. Es una pena que sea obligatorio para la Itzulia la etapa de Arrate. Bueno, no sé si es obligatorio o una compensación por la eliminación de la Euskal Bizikleta. A mí tampoco me gusta nada. La posibilidad de crono de 25 kms subiendo a Arrate me parece original y buena, una crono mixta.

    Por aquí está lloviendo o ha llovido bastante y las carreteras estarán peligrosas. A ver si les da por jugar.

    Y el debate por la mejor carrera del mundo….pfff…imposible, cada una tiene sus cositas. A mi me gusta el Mundial. Y si se pudiera hacer un mundial con un poquito de adoquín ni te cuento.

     
    • Pues en Richmond 2015 hay adoquín: de ese urbano moderno, y también algo del antiguo. Todo lo antiguo que pueda ser en una ciudad de EE.UU, claro.

       
  11. El problema de Arrate es que el ciclismo ha cambiado mucho y ya no hace daño. Fijémonos en la LBL y vemos que en los tiempos de Moreno Argentin, La Redoute era la última cota y decidía la carrera. Hoy vemos que tras ella hay que pasar tres subidas más. Ocurre algo parecido con el Poggio. Ya nadie gana atacando en la subida o en la bajada.

     
  12. Hola, coincido con Danibikes en mi afición a las carreras de un día gracias a este blog. Me encanta ver a los corredores dandose leña desde el primer metro de carrera, concentrados todo el tiempo.
    Eso es cada vez más difícil verlo en etapas de grandes vueltas, y más con esa puñetera manía de acabarlas en cuestas imposibles despues de kilómetros de paseo.
    En cuanto a los especialistas en las clasicas, yo creo que también dan color en las carreras de varios días con victorias sueltas y un ciclismo más de coraje que de potenciómetro. No me imagino un Tour sin esa gente, menudo coñazo, con los de siempre vigilándose la chepa y racaneando fuerzas.
    De la PR , quién gana no es lo que más me importa, lo que me mola es qué pasa por el medio , que vayan a toda hostia y que no haya caidas con consecuencias graves. Y luego que la gane el más listo y con mejores patas. Y si es Stybar, pues mejor.
    Un saludo

     
  13. En mi caso, la París-Roubaix y el Mundial son las dos únicas carreras del año por las que cambio planes para no perdérmelas. Los kilómetros previos y la entrada y paso del grupo de 200 corredores en el Trouée d’Arenberg és, para mi, el momento más emotivo de toda la temporada. Y luego viene la carrera tipo Matrioska, en el que el pelotón va empequeñeciendo de tramo en tramo. Me parece una carrera maravillosa, no lo puedo evitar. Quizás me influye la foto de Eric Vanderaerden cubierto de barro en el nº1 de Ciclismo a Fondo cuando era un crío y descubrí el ciclismo, que me despertó la curiosidad por esta carrera y que ya nunca me ha abandonado

    Si participan todas las estrellas que podrían venir, el problema es de las estrellas, no de la carrera. Se entiende que muchos no quieran sacrificar sus objetivos y sus contratos por la gloria, tampoco lo hago yo con mi trabajo y es fantástico que la organización no se pliegue a los tiempos modernos y modifiquen las carreras hasta hacerlas irreconocibles para atraer figuras. O la tomas o la dejas. Para esos experimentos ASO ya tiene a la Vuelta España, que la han manoseado hasta dejarla irreconocible.

    ¡Feliz París-Roubaix!

     
    • Suscribo el comentario de Ramontxu. Mundial y Roubaix son mis carreras preferidas, sobre todo Roubaix, porque se ha mantenido fiel a su esencia. En cambio en el Mundial, aunque sigue más o menos un patrón fijo, está sujeto a la localización en diferentes lugares, y a veces los circuitos pueden no dar la talla. Sin embargo, la lucha y competitividad que provoca la lucha por el arco iris puede llegar a suplir esa carencia.
      Creo que el gran atractivo de ambas es ese anacronismo que comparten: el Mundial por disputarse por selecciones nacionales y estar ajeno a intereses de marca…(bueno,sabemos que también los hay). Y la Roubaix por sus legendarios adoquines.
      Y en cuanto a comparación con la gloria que dan las grandes vueltas, yo me quedo con la gloria que dan las clásicas. Por una sencilla razón: el triunfador tiene que conjugar su prestación física con la estratégica…cosa que también exigen las grandes vueltas, pero la diferencia está en que en las clásicas no hay margen de error. Además en ellas concurren en mayor medida factores ocasionales, como el clima, pinchazos, caídas, o compañeros de fuga.
      La Roubaix ofrece ese encanto de incertidumbre de los viejos tiempos del ciclismo del tubular a la espalda, y eso le da un plus de expectación. Lo bonito de las clásicas, a pesar de que puedan ser previsibles por el sesgo de especialidad que requieren, es esa exigencia que puede concentrarse en un momento clave que hace que esperes esa fecha para presenciar kilómetros de ciclismo que casi nunca defraudan. En las clásicas te puedes olvidar bastante del actual ciclismo hiperplanificado, del ciclismo que cambia. Y Roubaix y Mundial tienen justo lo contrario. Ambas son carreras que no han cambiado. Son tradición ciclista imprescindible en un ciclismo que quiera sobrevivir a la decadencia a la que muchos de sus protagonistas lo han llevado.

       
  14. Vaya pinta tenía Valverde esprintando con la lengua fuera hoy en Markina!

    Kwiatkowski me parece una bestia parda, pero quien mucho abarca parece que poco aprieta.

    Gracias Sergio (y “comentaristas”), yo también me voy aficionando más a las pruebas de una día leyendo tus interesantes entradas, y tan buenos comentarios.

    PD:se sabe algo de los avisos en el mail por entrada nueva ahora que parece que todo funciona bien?

     
  15. pues no creo que el problema sea la carrera, vetusta y única en el mundo, sino unos campeones de laboratorio articiales qe ya no ejercen de campeones…
    … esta señora carrera la disputaron para ganar (algunos lo hicieron) Coppi, Merckx, Hinault, Lemond, Fignon y muchos más

     
    • Exacto. Los últimos grandes han sido Hinault, Lemond y Fignon. Luego llegó Indurain, gran corredor, pero centrado casi sólo en el Tour. Eso sí, creo que sus medallas mundialistas y el record de la hora le conceden un lugar en el Olimpo ciclista. A partir de ahí, ningún ganador o disputador de grandes vueltas a ejercido también como tal en pruebas de un día.
      Creo que los puntos Uci hacia las pruebas por etapas menoscaban demasiado el peso en el calendario de las clásicas.
      Pero el verdadero handicap es la presencia televisiva en medios generalistas, para los que es más fácil captar audiencia en los sucesivos capítulos-etapa de varios días correlativos. Se necesitaría una apuesta que ofreciera el paquete de clásicas, que motivara al espectador y al corredor. Se tendría que crear un auténtico gran premio para el rey de las clásicas, exclusivo, no diluido en la clasificación Uci-protour. Y en esa puntuación, sobreponderar las victorias para evitar campeones de puestómetro. Quizá con una clausula que exija haber ganado alguna de las grandes y haber participado en un mínimo de clásicas.

       
      • El record de Indurain es haber logrado Giro-Tour dos años seguidos. Es muy inexacto decir que estaba sólo centrado en el Tour, puesto que sus cuatro primeros Tours coincidieron con podios en otras grandes vueltas.

         
  16. Roubaix es única en su especie sobretodo pq casi nunca, un saludo a Dirk Demol, gana un desconocido.

    La razón de la especialización de esta carrera es la metamorfosis que han sufrido los vueltómanos desde la aparición de la EPO. Anteriormente era habitual que los más grandes tomaran parte…, y no lo hacían solo por cumplir. Apasionante es este final http://www.youtube.com/watch?v=oy9pG7qjRSU de ensueño. Todo un tratado teórico de como se debe afrontar el final de carrera.

    El año pasado me llevé una gran decepción con el espectador que privó a Stybar de dar la sorpresa…, quedó pendiente saber si habría aguantado, o no, hasta el final. http://www.youtube.com/watch?v=hT8BinCDysY

    Habemus Roubaix!!

     
  17. Estoy con Nick , tiene esta carrera tantas cosas, que no se puede despreciar solamente porque históricamente sea un oligopolio. En cuanto a lo de la mejor carrera del mundo, a mí particularmente, aunque me gusta la MSR, hay por lo menos 5 carreras en el norte que me gustan más, incluida esta.

     
  18. A mi también me encanta esta carrera, y también me he aficcionado a las clásicas gracias a Sergio.
    Yo creo que este año Devolder puede dar la sorpresa, si no sufre una caída como le sucedió en Flandes, ya que Cancellara va a estar muy marcado y seguro que el campeón belga se guarda un cartucho que lo mismo le sale bien. On verá..

     
  19. Cancellara parece tan fuerte y el máximo favorito, que planeo un final igual al que gano Van Summeren, cuando Cancellara no quiso ir detras, pidiendo relevos de Ballan y Hushovd, que nada regalaron. Una victoria para un outsider, de un equipo fuerte… desde luego : Terpstra. Pero por supesto, voté Payaso Wiggo!

     
  20. ¡Vaya comentaristas los de TVE! ¿Se puede ser más malo? No se enteran de nada, no conocen los corredores y encima no cuentan lo que está pasando, … Sólo saben hablar de las estrellas de los tramos….

    No conocen ni a Tom Boonen!!!!!!!

     
    • Coincido en todo contigo. Lo vi por ordenador y me pase de eurosport a teledeporte por la calidad de imagen pero los comentaristas eran penosos. no se enteraan de nada

       

Leave a Reply to Enekyn SkyWalker Cancel reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *