Miseria del ciclismo cántabro

Miseria del ciclismo cántabro

Con la caída de Cobo termina por cerrarse el círculo del ciclismo cántabro, abierto a mitad de la década pasada con la irrupción en el ciclismo del Saunier Duval. Era un equipo de nuevo cuño al que su director quiso darle una impronta regional con ese guiño a los corredores de la zona, en una acción parecida a la que Juan Fernández hizo con sus andaluces escaladores. Al final, lo que contaba era la impronta del otro tipo. La de siempre.

El primero en destacar fue Ventoso, uno de los pocos corredores de la historia del ciclismo que pueden decir que ganaron su primera carrera profesional. Fue la primera etapa del Tour de Qatar 2004, batiendo a gente como Boonen y McEwen, y con solo 22 años. Después fue evolucionado hacia un tipo de sprinter poderoso y que subía mucho, e incluso acabó cuarto en la Gante-Wevelgem 2007.

Fue su último año en Saunier.… Leer más

Demaré ennoblece una vulgar etapa del Giro

Mientras los ciclistas cruzaban ramplonamente la llanura padana hasta Módena, los enemigos del ciclismo tenían la imaginación en montañas nevadas (¿se subirá? ¿no se subirá?), batallas nada garantizadas y etapas para las que todavía quedan bastantes días. Con un ojo en el monitor -y porque están obligados- y con el otro en la previsión meteorológica, exactamente igual que todos los años con la Roubaix. Que lllueva, para que haya barro. Que la carretera esté abierta, para que suban entre paredes de hielo de varios metros.

La belleza intrínseca de etapas como la de hoy, ciertamente fumada por el pelotón, pero que ha tenido espectaculares precedentes no hace muchos años -como aquella ganada por el Bardiani en bloque, en una buena exhibición de preparación médica-, no necesita explicación. Es tan ciclismo un recorrido llano como uno de montaña, y si hubiese habido una montonera con un favorito estarían hablando del hay que estar atentos, cada etapa cuenta y todo ese arsenal de frases hechas.… Leer más

La “autoregulación” del pelotón

Pocas cosas más aburridas en el ciclismo que una contrarreloj, y más en esta Vuelta donde Froome está dominando a su antojo. A pesar de perder bastantes segundos en el primer punto intermedio (km. 13 de un total de 40), después fue a ganar su segunda crono larga seguida en la Vuelta, tras la de 2016. El recorrido, que se había presentado como sinuoso, no lo fue tanto porque soplaba viento de culo, hasta el punto de marcar una media de 51´319 km/h.

Kelderman se quedó a 29″ -entró destrozado en meta, en contraste con el líder, sonriendo y con pintas de poder seguir 20 km. más- y Nibali, sorprendente tercero, a 57″, 2″ mejor que Zakarin y Contador, empatados a tiempo. Unas diferencias mucho menores de lo que se pensaba a priori, y en línea con una Vuelta que no termina de despegar en cuanto a sentenciar clasificaciones.

Tras haber cogido el liderato en la tercera etapa, Froome lidera con únicamente 1´58″ de ventaja sobre Nibali, un margen que se antoja muy escaso ante el dominio mostrado en carretera, y las dos etapas ganadas.… Leer más

El guardián de ruta para Quintana

El guardián de ruta para Quintana

Poca sorpresa puede haber cuando solo queda una etapa en línea y un simulacro de contrarreloj para ganar una de las pruebas por etapas más prestigiosas del calendario, y poca sorpresa ha habido: Nairo Quintana gana la Tirreno-Adriático 2015 -el año pasado había sido segundo-, en lo que es su octava prueba por etapas a sus 25 años. Y su sexta victoria en Italia.

El lunes cayó un tremendo aguacero sobre el pelotón, condicionando todo el desarrollo de la etapa con final en Porto Sant´Elpidio. La etapa tenía un circuito final consistente en dar vueltas al clásico lungomare italiano, esto es: una playa rectilínea y un mar de casas de un máximo de tres alturas, todo con ambiente de cementerio salvo dos meses al año. Además, se incluía visita turística por el polígono industrial de la zona, especializado en fabricar zapatos de señora de gama media.

Con ese panorama, el pelotón fue agrupado mientras se sucedían los abandonos, gente que se descolgaba para ir más segura, y el esperado sprint, que por una vez fue para Peter Sagan.… Leer más

Pocas banderas en el próximo Tour

Dopado-Dopado-Bronce

La ronda de campeonatos nacionales empezó el sábado en Italia de la peor manera posible. La prueba italiana, que con bastante frecuencia depara sorpresas, fue a caer este año en el campo de un corredor que acaba de volver tras cumplir sanción por dopaje, que milita en pulcro Androni, que arrasó en un circuito muy duro y que se llama Franco Pellizotti.

Cumpliendo una inveterada y reciente costumbre del ciclismo transalpino, el tricolore no estará en el próximo Tour. Mejor así. En la previa Renato di Rocco, presidente de la Federación, dijo que no subiría al podio a entregarle una medalla a un dopado, ante la posibilidad muy cierta de que Di Luca o Rebellin ganasen el oro. Ganó Pellizotti y Di Rocco subió al podio a endosarle la medalla, dando a entender que la Federación sigue respaldado al corredor que absolvió y que el TAS tuvo que condenar por el pasaporte biológico.… Leer más

Un gran Giro (y lo que viene)

Para el etapón de ciclismo que se vivió ayer en el Giro hacía falta el ingrediente básico del ciclismo, que es resistencia. Doce días de competición seguidos llevaba la carrera merced a la herencia de Zomegnan, la estúpida excursión a Dinamarca y el día de descanso el cuarto día.

Hasta Ventoso, un corredor experimentado, reconocía que jamás había hecho doce días de competición seguidos. Aparte de lo ya recorrido y comentado, los ciclistas habían acumulado en los últimos días etapas de esas de “transición”, como por ejemplo la que ganó Roberto Ferrari con 242 km. y 6h 30´ en la bici. Ganó por el desorden de una caída -Cavendish tuvo que frenar y sólo fue cuarto- y porque el rival era Chicchi, el supuesto sprinter treintañero que jamás se había colado entre los tres mejores en el sprint de una gran vuelta.

También porque recorrió toda esa distancia, claro, y ha seguido ganando porque es de los pocos sprinters que no se han ido a casa antes de la primera etapa de montaña (Goss, Demare, Haedo, Renshaw, Lancaster, Bonnet), o no han tenido la connivencia de los jueces tras dejarse remolcar en etapas que no eran de montaña, como Cavendish.… Leer más

Todo es Giro, todo es ciclismo

Metan a un puñado de los mejores corredores del mundo -un puñado pequeño, pero es lo que hay-, el recorrido adecuado en el país adecuado y sale ciclismo. La fórmula es tan fácil y tan antigua como el propio deporte del ciclismo, que sigue insistiendo en inventos cuando la receta es bien conocido.

Ha sido llegar la carrera a Italia y destaparse en todo su esplendor. El primer sprint en Fano fue para Cavendish, un paréntesis hacia el carrusel de los siguientes días: el viernes se llegaba a Porto Sant´Elpidio -el Giro sólo había estado en una ocasión anterior, con victoria de Cipollini (1992)- a través de la tradicional etapa por las colinas costeras de los Apeninos y llegó la fuga.

Fue una fuga dentro de una fuga, la tradicional exhibición de un Homo-Savio de cada Giro: corredores que a duras penas se pueden tener encima de la bici sin caerse, o circular en pelotón, y que todos los años tienen su momento de gloria en ese equipo apestoso llamado Androni, o Diquigiovanni, pero al que es mejor referirse como el “equipo de Savio”.… Leer más

A temporada pasada

Otra temporada que pasa

Con las últimas carreras ya disputadas, toca ahora recuperar este post de enero y ver qué ha sido de sus protagonistas, esperados para este 2011 y que no siempre han llegado.

Ventoso: dicho y hecho. El ciclista cántabro ha logrado cinco victorias, destacando especialmente un maravilloso sprint en el Giro, pero una temporada mal planificada por su equipo (en parte debido a circunstancias sobrevenidas) le ha impedido brillar más, especialmente en un Tour al servicio de un corredor incapaz, y en un parte final de la estación que le era muy propicia. El próximo año, mejor aún.

Zubeldia: parecía que podía recuperar un poco de caché con la ida de Armstrong y la senectud de todo el RadioShack, pero no ha sido así. En el Tour se quedó de jefe de filas y no pasó del puesto 16º, el próximo año le tocará tirar de los Schleck.

Leukemans: por debajo de su increíble 2010, el belga  brilló en la Flecha de Brabante, donde Gilbert lo pastoreó y el aceptó de buena gana, y fue top-ten en otras tres grandes clásicas de primavera.… Leer más

Un año sprintando con el arcoiris

Daddy boy

No hubo nada en el Mundial de Copenhague. Ganó el favorito único en la previa -y el que veía otros no había desconocía los últimos cuatro Tours, desde que en 2008 eclosionase el fenómeno británico- y una carrera llana y perfectamente controlada por el equipo del ganador, convirtió una de la mejores citas del año en una etapa de gran vuelta. Insulsa y ya vista.

Con un sol crepuscular, los más de doscientos ciclistas que disputaron el Mundial realizaron un ejercicio físico de menos de seis horas, a 45 km/h de media, y donde más de 100 entraron en tiempo del ganador, y más de 170 acabaron la carrera. Muchos de los que no lo hicieron fue por caída, no por un recorrido desasosegante.

La carrera resultante, dadas estas condiciones, fue así: la selección de Reino Unido controló la carrera -impresionante Wiggins en la última vuelta- y, a falta de un km.,… Leer más

Maravilloso sprint de Ventoso en Anagni

Penúltima etapa del Giro 2009, ya no parece el mismo

No hace tanto que una etapa del Giro acabó en Anagni. Fue en la edición del centenario, la que fue a Menchov y que después fue cambiando el podio a medida que salían los escándalos de dopaje: fue una edición preciosa, con Di Luca recortando tiempo por las bonificaciones al ruso etapa a etapa. La de Anagni estaba situada entre el final en el Vesubio y la crono final de Roma.

Por eso casi nadie se acuerda de ella. Anagni es una bella localidad de la pobretona provincia de Frosinone -para los muy aficionados: de aquí era el gran Franco Vona-, famosa por su maravilloso duomo románico y las tradicionales fuentes termales que hay por casi toda Italia, y cuya relativa abundancia hace que una localidad termal no tenga nada de exclusivo, al contrario. Sin embargo, en aquella penúltima etapa del Giro 2009 la victoria de etapa fue para un tal Phillipe Gilbert, que por entonces apenas contaba en su palmarés con una París-Tours, un nuevo maillot y tres semanas de anonimato por Italia hasta que ganó su primera etapa en una grande, imponiéndose a Voeckler.… Leer más