Campenaerts en los Alpes
En todo el pelotón se sabía que hoy era día la fuga. Lo confirmó Quijada de Burro Lazkano en meta, muy decepcionado por no haber podido meterse en el corte final: “desde el día de Rímini me había dicho que tenía este día marcado”.
Se refería a Campenaerts, un clásico del pelotón que, dado que ya ha aprendido a la fuerza que no puede escaparse en el llano, decidió al mes de la presentación del recorrido del Tour, que esta iba a ser su etapa. Y no solo eso: se lo dijo a posible rivales hace dos semanas y media. Confianza en uno mismo. Quizás.
La etapa daba para mucho más. De hecho, de no ser un Tour donde los pesos pesados han pactado enfrentarse de tu a tu en determinadas etapas, o de haber sido un Tour con una diferencia más pequeña, la etapa de hoy hubiese dado más de sí, incluyendo una encerrona final llegando a Barcelonette (increíble que solo sea la segunda vez en la historia que el Tour acaba ahí), consistente en sacar a los corredores de la carretera principal, y meterlos por una secundaria.… Leer más