A temporada pasada

Todo acaba llegando. El otoño, la lluvia, a Valverde su jubilación, y al resto de ciclistas y lectores el repaso al tradicional post de inicio de la temporada, cuya lectura es necesaria y nunca facultativa para poder entender bien lo atinado de mi particular bola de cristal.

Einer Rubio: era fácil acertar. Tercer año con los caninos, y tercer año anónimo, huero, yermo. En su equipo tampoco han considerado necesario alinearlo en ninguna Gran Vuelta, a saber por qué. Seguro que hay un gran campeón agazapado, esperando su oportunidad. O que mire lo que le ha pasado al nieto de Momeñe, al que han echado del equipo después de tres años haciendo virtualmente nada.

Carlos Rodríguez: aunque también era fácil de acertar, ha superado con creces las expectativas. Ganó una etapa en la Itzulia, campeón nacional, estuvo cerca de acabar top-five en la Vuelta -séptimo final por una caída-, y el momento brillante de quedar quinto en Lombardía.… Leer más

Una atención especial para…

Esta sección fija del blog no se ha visto condicionada por la cancelación para 2022 de las carreras australianas, sencillamente porque jamás han sido tenidas en cuenta en el inicio de la temporada. Dado que el próximo domingo empieza el circuito europeo con la celebración del Luig Puig -o como se llame-, es el momento propicio para lanzar los vaticinios sobre los corredores a seguir.

Una mezcla de nigromancia, tino y desatino, y no poca aventura, que se ve complementada a final de temporada con el análisis de lo que finalmente ha pasado. ¡Quedan avisados!

Einer Rubio: el colombiano, fichado por la Patrulla Canina cuando no podía acceder a nadie en el mercado, ha demostrado bien poco en sus dos primeros años en el equipo.  Será la famosa maduración lenta de la casa navarra, o será que es otro corredor fallido de ese mismo país, y de ese mismo equipo. Apuesto por eso último.… Leer más

Todo listo para el circo de Guillén

Con estas noticias Berlanga o Luis Carandell lo bordaban. La Vuelta a España de Guillén va dejando pufos allí por donde va, el más notorio el año pasado cuando prometió a las autoridades municipales de un pueblo asturiano de vacas y prejubilados un retorno económico extraordinario, y al final no hubo nada. Como siempre, por otra parte.

Estaban muy ilusionados. Llegaba la Vuelta, con sus famosos “1000 millones de espectadores en 180 países”, y creían que les había tocado El Gordo. Les tocó una mierda, y no solo por las restricciones del coronavirus. Ahora, un año después, reclaman -ojo a esta costumbre asturiana- que la Vuelta vuelva pronto para compensar las “pérdidas” de 2020. “No trajo beneficios” (coda: dejó pérdidas, y cuantiosas).

Van aviados. La Vuelta de Guillén se cobra su pieza en tiempo y forma, y después vuelve cuando quiere para “no agotar una cima”. En el caso de la región de los subvencionados y mantenidos es cada año, gracias a un contrato secreto entre la Administración regional y la empresa extractiva de Guillén: en esta ocasión le ha tocado El Gordo al Gamoniteiru, cima con la que estarán dando la brasa durante dos semanas y media, como suele ser habitual en una carrera con pocas o ninguna oportunidad de hacer diferencias previas.… Leer más

A través de Morbihan

El título del post recuerda una carrera a la que cercenaron el nombre. Continúa hoy en día, en medio del rico calendario francés. Nadie se interesa por ella. Los corredores franceses, y algún extranjero circunstancialmente en esos equipos.

Pocos conocían las carreteras de hoy. Hubiese sido más útil que la enésima visita a Tignes o al Tourmalet, cuya carretera no ha cambiado desde la última vez. Por supuesto, esto no justifica lo visto hoy. Tampoco la aborrecible actitud del pelotón. La de siempre. Después vienen los lamentos.

Morbihan es una de las regiones de Bretaña. De manera no casual, la etapa ha acabado en una ciudad que jamás había albergado la meta del Tour, carrera con cien años de historia. En la última vez que la Gran Carrera pasó por la región, se hizo parada y fonda en un pueblo recóndito por el simple hecho de que Lappartient es de ahí.… Leer más

Campeones nacionales de verdad

A falta de otro aliciente, al menos este año los campeonatos nacionales han dejado una relación de ganadores que aseguran que se vea su maillot distintivo durante los próximos doce meses. Es la característica común entre los países donde es una prueba de primer nivel (Francia, Italia y Bélgica), y también en los otros donde ha decaído, como España.

Aquí hubo un buen ritmo muy lejos de meta, en una prueba que antes era monopolizada por la Patrulla Canina, y donde el péndulo ha basculado desde hace unos años al Astana, un equipo que se preocupa bastante por esta prueba, allí donde tenga corredores representados. Es todo lo contrario que la banda navarra, que ni ha llegado a alienar a los corredores que irán al Tour de Francia, exactamente igual que hacía Manolo Saiz.

Solo llegó al sprint final, en cuesta, el madrileño Gonzalo Serrano, que está haciendo una temporada de debut en WT de bastante relieve.… Leer más

Un nuevo capítulo de la maldición francesa de Roglic

Un nuevo capítulo de la maldición francesa de Roglic

Que las caídas forman parte del ciclismo es un tópico generalizado, hasta tal punto que muchos cantamañas que viven de este deporte no dudan en decir en público que es “un deporte de riesgo”, como si fuese equiparable al parapente o el descenso de aguas bravas. Hay caídas, igual que hay pinchazos, enfermedades y otras situaciones. Se vive pensando en otras cosas, no en que vaya a pasar.

En el número uno del mundo a lo mejor eso empieza a cambiar. En el arco de un año natural ha perdido las tres pruebas por etapas más importantes que se disputan en Francia, y las tres en el último día competitivo. Dos por caída, otra por caída de un meteoro. A pesar de esta increíble racha de mala suerte, el campeón Primoz Roglic no parece afectado, más allá de las oportunidades perdidas. De momento; porque tan mal agüero hace que, al final, vaya a salir a competir pensando en otra fatalidad, y eso suele ser la condena de un deportista.… Leer más

Un mediocre que llora cuando gana

Sí, Sam Bennet es un ciclista mediocre, incapaz de llegar a Vía Roma con los favoritos, e incapaz de pasar el Kemmelberg con los mejores, a pesar de militar en el mejor equipo del mundo para esos menesteres. Un ciclista irlandés que “ha ido conquistando objetivos”, con esa retórica deportiva de viene desde abajo, es bueno.

Este año está con el subidón-subidón de haber reemplazado a Viviani en el puesto fungible y fácilmente amortizable de hombre rápido de Lefevre, el mismo que garantiza del orden de diez victorias al año -más de la mitad WT- al agraciado, so pena de que, una vez fuera, se arrastrará a niveles de amateur.

Entrar como los gorilas y señalando el nombre de la camada

Ahí está el ejemplo clarividente del que llegó a ser campeón europeo e italiano (¡incluso en un circuito duro!), incapaz de ganar una sola carrera este año, ni de acabar entre los cinco primeros en ningún sprint del Tour o del Giro.… Leer más