Decadente-Adriático

Los problemas de la Tirreno-Adriático eran muy evidentes desde que decidieron apostar por ediciones con un puertarraco que llevaron a que la carrera fuese para consumados corredores de tres semanas, a los que muchas veces les bastaba con un único ataque para ganar. Se consiguió salir de la apatía de las ediciones para sprinters, y de aquella memorable edición al puestómetro entre Garzelli, Evans y Scarponi. Ahora, como mal menor, proponen un recorrido sin apenas subidas.
Era lo normal tras una edición aborrecible donde en la etapa de montaña entraron tropecientos al sprint, pero dudo mucho que los males de la carrera se solucionen con la edición 2019. Por lo pronto, la CRE aburrida y cansina del primer día seguirá siendo decisiva, incluso mucho más que en otra ediciones: aquel equipo que pierda más de 20″ quedará descartado para una general que se decidirá en gran medida por segunditos y bonificaciones.… Leer más