No ha habido ciclismo en Bélgica

Waerenskjold con el maillot de campeón de España

La sensación general de las tres primeras pruebas en Bélgica, que tradicionalmente dan el inicio a la temporada que realmente cuenta, ha sido extremadamente decepcionante. Ni la Het Volk, ni K-B-K, ni Le Samyn han llegado al nivel mínimamente esperado por su participación -especialmente la primera-, por la espera, o por las expectativas previas.

No es casualidad. En la primera, convertida en un remedo del antiguo Tour de Flandes, nadie consiguió ni intentó hacer la selección. No hubo ni ritmo, ni competición, ni disputa. Nadie parecía interesado en atacar, y las sucesivas cotas de la parte final únicamente reflejaron la parsimonia existente: baste decir que el talento checo Vacek, del Lidl y sin Pedersen de capitán, parecía el más fuerte tanto en el Grammont como en el Bosberg, y lo era únicamente por aguantar delante, sin irse jamás. Entonces, ¿para qué tienes 22 años y debutas en esa carrera? ¿para aguantar en el grupo?

Ese 1´95, que se vea

Van Aert, favorito del público, daba malas muestras de su estado de forma. Aguantar, y nada más. En el tramo final, cuando el valiente Kung se fue por delante, dejó sus funciones consuetudinarias de perseguir a su compañero Jorgenson, pero ni siquiera se puso cerca del yanki: iba a cola del pelotón, cada vez más numeroso e indecente, hasta el punto de que llegaron al sprint final de Ninove en torno a 50 corredores.

La prueba había sido un sopor mayúsculo, el anticlimax del debut de la temporada, pero el sprint fue magnífico. El máximo favorito era Philipsen, pero hubo una gran sorpresa con el extraordinario sprint, pegado a la valla, del noruego Waerenskjold: el Uno-X había estado controlando en el tramo final con una buena delegación de corredores, por lo que algo sabían de las opciones de su compañero.

Antes de competir con los profesionales ganó múltiples etapas en el Porvenir, obtuvo destacados resultados en varios mundiales consecutivos -incluyendo el oro CRI en 2022- , pero la verdad es que sus dos temporadas pasadas habían sido bastante decepcionantes, a pesar de haber disputado los dos Tour de ese periodo. En línea con su equipo, vaya por delante, y tampoco ha ayudado que sea un gigantón de 1´95 metros de altura y 92 kg.

Quédense con esos datos, porque ha subido el Grammont con los mejores. Cosas de los desarrollos compactos, supongo. El nórdico ya había sido protagonista este temporada, y de una manera no relacionada con su rendimiento en carretera: renunció a ir al circo ciclista de Arabia Saudí, diciendo que no se le había perdido nada por ahí, y que en ese reino medieval no se respetan los derechos de muchos colectivos. Muy noruego.

El anuncio de El Payaso

Philipsen, que entró francamente enfadado en meta, también se vio superado por el jovencísimo sprinter del Quick Step Paul Magnier, un francés que el año pasado ya ganó varias carreras de neoprofesional. Parece que el retirado Lefevre ha dejado encaminada la habitual bicefalía de sprinters en sus equipos. Merlier para las citas grandes y planas, y el talento francés para todo lo demás.

El impulsivo sprinter del Alpecin se resarció al día siguiente en la Kuurne, donde no hubo sorpresa alguna -qué añoranza de las victorias en su día de Van Aert o Stuyven, y no estoy hablando de la prehistoria- y, de nuevo lanzado por Kaden Groves, se impuso de manera más o menos clara a Kooij y el resucitado Hofstetter. Más o menos cuando estaba levantando los brazos su equipo empezó a insinuar que El Nietísimo iba a adelantar su debut en la temporada a Le Samyn de 48 horas después, a saber por qué.

Gilbert ganó Le Samyn en 2008, antes de ser Gilbert

En años recientes el lagunar corredor debutaba en Sanremo, y este 2025 le ha salido el capricho -una palabra que es un epíteto en este caso- de ir a una carrera de pueblo, convertida en objetivo por la tontería existente con las pruebas de un día que se disputan en Bélgica. Automáticamente se convirtió en el favorito principal, y la duda era cómo iba a ganar.

Es cierto que hizo un ataque bien lejos de meta, para no lograr nada, y también es cierto que ganó al sprint de una manera salvaje: arrancó cuando vio la pancarta, y sacó tal ventaja a sus rivales que entró sin pedalear. El sprint de verdad lo ganó Magnier, demostrando que hay corredor, y después entró una ristra bastante amplia de corredores que, 48 horas antes, habían fantaseado con un buen papel en la prueba, incluso con ganar, pero que se vieron frustrados por el enésimo capricho del corredor con pedigrí.

¿Qué aporta Le Samyn al palmarés de treintañero de Van der Poel? Nada, y tampoco al de su equipo, que el año pasado ganó tres de los cinco Monumentos (los otros dos fueron para Pogacar). ¿Qué hacía en la prueba? El abusón, como siempre. Lo que antes era una cita entre semana con emoción y disputa, se convirtió en el colofón final de un inicio de temporada en Bélgica extremadamente decepcionante, a la espera de que todo mejore con las pruebas por etapas de inicio de marzo.

***

Mikel Landa debutará este mismo sábado, con 36 años, en Strade Bianche. Quizás no haya aprendido de la rotura de clavícula de Bernal en la prueba de Jaén.

***

Arribas y otros propagandistas están azuzando la idea de Pogacar tomando la salida este mismo año en París-Roubaix. Muy bien, el propio esloveno ha hecho sus cucamonas en redes sociales sobre esta posibilidad, y desde aquí fuí el primero en decir que su auténtico rival era la Historia, hace ya cinco temporadas.

***

Este año la Milán-Turín, que se disputa el miércoles antes de la Sanremo, acabará de nuevo en Superga. Es una buena decisión, vista la baja participación cuando han ofrecido un perfil más o menos llano, intentanto atraer a los favoritos de la Clásica de Clásicas.

***

La mejor manera de entender el salto de Ayuso esta temporada: por una parte enlaza con Pogacar, por la otra con la alta tensión….

***

Según este medio de propaganda, la reciente Copa América de vela dejó en la economía regional catalana 1034 millones de euros de retorno, 34 millones por encima de los inicialmente previstos con esta sencilla técnica: “pon mil millones”. El “estudio” lo ha hecho la Universidad de Barcelona, y habla por sí solo; de la institución académica, y de la mierda del deporte y sus retornos.

***

En Asturias van a tener a seis profesionales en esta temporada, y el entusiasta redactor de un periódico local ya habla de “nueva Edad de Oro”,  y cita como precedentes a la época formada por Samuel Sánchez -se retiró por un positivo-, Rubiera -cliente de Ferrari y vasallo de Armstrong-, Noval -lo mismo, y cazador furtivo-, Santi Pérez -retirado por dopaje antes de los 30 años-, Barredo -todo su palmarés, todo, anulado por dopaje- y Dani Cagarro, uno que estaba en los jóvenes Liberty y que se remolcaba de los coches.

El curioso concepto de “Edad de Oro” en esa zona.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
 

5 thoughts on “No ha habido ciclismo en Bélgica

  1. Sobre el penúltimo suelto: y yo que siempre pensé que la Universidad de Barcelona estaba entre las mejores de España…

     
  2. Da lo mismo donde lo leas, Pogacar es Dios. Nada le derrota. Si hace falta es capaz de pasar con su Colnago por encima de Marc Márquez y su Ducati.

    El inicio de temporada de todo el UAE es nauseabundo. Me temo que se van a pasar el año como Nacho Vidal, sacándose la polla.

     
  3. Se echa uno buenas risas con los pies de foto y las propias fotos del blog.
    Gran observación el último suelto.

     
  4. Sigo manteniendo que la Copa América, para determinados políticos de BCN, fue un éxito. ¿Por qué? Gracias a ser considerado un evento de interés nacional llegó dinero fresco y directo para una reforma -necesaria- del Port Olímpic y que llevaba en debate muchos años, como suele ser habitual en BCN.

    Ésto ya lo comenté en otro post, cada vez que hay un gran evento en BCN se aprovecha para hacer grandes cambios urbanos, porque de lo contrario no se hubiera producido. Bien por la falta de consenso, bien porque en los presupuestos ordinarios no suele llegar el dinero suficiente. Ya sabes, la mayoría de CC.AA. suelen recibir efectivamente el 30% de lo presupuestado. La excepción es la capital.

    Con ésto, y es un aviso a navegantes, no quiero apelar a lo de siempre: la culpa de es de Madrit. Lo que trato de explicar es por qué en su momento un partido como los Comunes de Ada Colau se posicionó favor, porque vio la oportunidad de acometer una reforma de arriba a abajo de una zona muy degradada y que encontraba la oposición del Gremio de la Hostelería. ¿Por qué? Muchos garitos nocturnos y de ocio.

    Evidentemente no tuvo una gran repercusión ni mediática ni de público. Pero a nivel urbano sí. Como ocurrió con el Fòrum, una idea muy barcelonesa que fracasó y que sin embargo, permitió completar la remodelación de la esquina de la Diagonal, la única parte que quedó sin remodelar durante el período de la olimpiada.

    Un esquina que, por cierto, acogerá la salida de la crono del próximo Tour 2026. Un Tour que sí creo que será un éxito de público: por la época del año, por la propia ciudad y porque Montjuic, una montaña muy ciclista, lo merece.

     

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *