Cagalera colectiva del Bora, una Vuelta y un deporte enmierdado

Las dos últimas etapas en línea de la Vuelta apenas han deparado sorpresa. Ni siquiera que su transcendencia haya sido inversa -quedó todo resuelto en la etapa monopuerto, la etapa reina ha sido una inmensa montaña de mierda de impronta guilleniana-, o que la crono de mañana no vaya a servir para gran cosa, porque si esta Vuelta no llega a tener el aliciente de O´Connor, hubiese sido muy poquita cosa.

Y, sin embargo, han pasado cosas. De esas de gran calado para entender la situación de el ciclismo que cambia. Para entenderlo mejor, no se puede explicar una etapa sin la otra, aunque ayer ya hubiesen saltado todas las alarmas.

Etapa riojana, con final en Moncalvillo. Etapa estúpida y convertida en monopuerto, aunque oficialmente no vaya a ser así, porque antes de la subida final se subió una cosita totalmente intranscendente. Fuga controlada y un pelotón que, por una vez, no deja que los escapados lleguen.… Leer más

Demasiado increíble para ser cierto, Castrillo

Vistos los titulares de las dos últimas entradas, lo lógico hubiese sido poner hoy “Asturias no sirve para nada”, o algo similar, pero como ya se ha usado en otras ocasiones, quedaría feo emplearlo en una jornada como la de ayer, en la que sí han pasado cosas en la montaña asturiana (pocas, más bien), que una vez más se ha quedado en la aspiración de “grandes cosas”.

La etapa con final en Cuitu Negru fue rapidísima en todo su desarrollo, pero en absoluto “histórica”, como gimoteaba el indecente Carlos Hipócrita De Andrés entre la niebla, muy poco antes de cortar la emisión apenas 5´ después de haber terminado la etapa. No hubo continuación ni en Teledeporte, ni La 2, y me dicen que en la web hubo un poquito más, sin sonido. No se vio el podio. No se vieron las reacciones de los protagonistas.

La situación, auténticamente indecente, es congruente con lo que está siendo la cobertura técnica de la carrera, realmente lamentable y donde se ha escamoteado a los espectadores aspectos cruciales de la misma.… Leer más

Primera vuelta para Carlos Rodríguez

La Vuelta al País Vasco se cerró en falso con una victoria neta de Juan Ayuso, en puridad su primera gran victoria, tras varios tiros al palo en pruebas equivalentes. En falso no porque el ciclista alicantino no mereciese la victoria, sino porque sus rivales, a los que jamás hubiese derrotado, se tuvieron que retirar por una brutal caída atribuible por entero a la organización.

Doce días se ha tirado en el hospital de Vitoria el ganador del Tour Vingegaard, y todavía hace tres días Stef Cras señalaba directamente a la organización; en los medios patrios, como apuntado en su momento, se ha optado por callar de la misma forma vergonzante que se callaba ante el dopaje, porque “en los otros países también se caen” (la fuerza de la gravedad es universal), pasando de puntillas por el lamentable hecho de que la curva estaba mal señalizada, y que una carrera ciclista jamás debería pasar por un firme así.… Leer más

Una Volta memorable

¡Y están todos tan contentos! Organizadores, fans, ¿rivales? -si los hubiera o hubiese- y, por supuesto, el gran beneficiado. Pogacar ha arrasado en la Volta a Cataluña -cuatro etapas y un segundo puesto por error de equipo y de cálculo-, logrando la mayor diferencia sobre el segundo clasificado en más de 40 años. Una de las mayores jamás registradas en una vuelta WT de una semana, al menos desde que existe la categoría.

Era lo previsible, por otra parte. Traes a un superclase de época como el esloveno, y el recorrido coincide casualmente con que es uno de los más difíciles de los últimos tiempos, en una carrera que es sota-caballo-rey en cuanto a recorridos. Lo de Pogacar en Cataluña ha sido un manu militari del que hay que estar muy poco orgullosos, por lo que supone para la competición.

A todos nos emboba la facilidad del esloveno y su indudable talento, pero también tiene que llevar a sospechar que, en puertos donde jamás se ha marcado ninguna diferencia significativa, el Rey Sol haya sacado diferencias que hubiesen sentenciado, por sí solas, la carrera.… Leer más

Pogacar, de la cagalera a la victoria (y qué victoria)

Quiero querer a la Volta, pero se hace difícilísimo. La compra por parte de ASO de la prueba del CC. Sants ha mejorado la participación y el posicionamiento mediático de la prueba, incluso también la realización televisiva, pero no lo suficiente.

Es imposible escribir sobre las dos primeras etapas de la edición 2024 sin tener en cuenta la deplorable realización televisiva, al fin y al cabo el producto que venden porque el ciclismo es un deporte que nos llega mediado por la televisión. Compite Pogacar, y Pogacar es el Rey Sol sobre el que gira una prueba que, de no ser por el concurso de El Mejor™, tendría poco o ningún interés.

Fíjense, por ejemplo, en la tradicional nómina de sprinters, con mucha diferencia una de las peores de una prueba WT, y una seña de identidad de la carrera. Este año se han superado, y el hombre más rápido presente es….CoquardLeer más

Un gregario de Vingegaard gana París-Niza

Un gregario de Vingegaard gana París-Niza

Que la París-Niza es año tras año una de las mejores citas del calendario, y que haya alcanzado una fórmula mágica donde todo queda por decidir para el último día, habiendo habido alternativas y alternancias durante todos los días previos, merece todo el reconocimiento.

Tras el auténtico arrasazo de Pogacar el año pasado -entonces y ahora una excepción en la carrera-, la edición 2024 ha vuelto a ser memorable, incluyendo vuelco en la general el último día. Lo de menos es el ganador final, uno que encaja perfectamente en la tradición de la carrera -que ha visto ganar a gente como Jaksche o Julich, passista-scalatore-, y que probablemente haya obtenido lo que será la mejor victoria de su polivalente carrera.

Ha pasado de todo, y todo bueno y en la tradición de la carrera. No ha pasado nada raro, porque Jorgenson era un corredor que ya había apuntado para este tipo de pruebas, y tampoco es tanto el salto efectuado desde lo visto en Patrulla Canina.… Leer más

El mejor ciclista del año otro año más

Parecía que era el año en que se presentaba con más dudas, y Pogacar ha vuelto a cumplir con su cita anual en Lombardía. Tres participaciones, tres victorias. Además, la victoria del pasado sábado ha sido aún más incontestable que las dos precedentes.

La carrera no tuvo mucha historia. Es el Lombardía, una carrera para especialistas donde es habitual encontrar a gente que repite victoria, incluso entre gente no especialmente ganadora: vienen a la cabeza los ejemplos de Cunego, J. Rodríguez o Nibali. Que gane un corredor como Mollema -curiosamente, tampoco un gran ganador- o Pinot -ídem- es la excepción.

Pogacar ha encontrado en la carrera un coto particular donde incluso se ha permitido ganar en solitario, atacando a 32 km. de meta. Si en 2021 le había acompañado hasta meta Masnada -jamás se ha vuelto a ver en una así- y en 2022 Mas -jamás se ha vuelto ni volverá a ver en una así-, esta vez el campeón esloveno quiso despejar todas las dudas de una manera concreta y voraz.… Leer más

Evenepoel fracasa en su terreno

La gran noticia de la esperada crono de la Vuelta -por única, no por decisiva, porque 25 km. llanos nunca lo serán- es que el defensor del título ha flaqueado en su terreno. El campeón del mundo, el que se ha pasado desde finales de julio compitiendo y ganando -San Sebastián, Mundial de ruta y crono- ha ido a fallar, de nuevo, en la crono.

Ya le pasó en el Giro, donde ganó la prueba por un mísero segundo concedido por la organización, cuando ya tenía previsto el abandono tras haber cumplido los objetivos del contrato firmado: etapa + llegar al día descanso; ahora le ha pasado en forma de únicamente 20″ sobre Roglic, no lograr el maillot de líder, y ni siquiera ganar la etapa.

El recorrido era una absoluta mierda. Un interés por mostrar las calles de Valladolid, ciudad de fonda y nunca parada, y ninguno por el ciclismo: medias de 56 km/h y completada en media hora.Leer más

Un Giro pasado por agua

Ha dejado marejada el abandono del líder del Giro de Italia. No podía ser menos: en lo que llevamos de siglo solo había pasado tres veces (Rasmussen 2007, Anton 2010, Tony Martin 2015), y nunca en la carrera italiana. Nunca con alguien al que le habían pagado una millonada por participar.

Tras el día de descanso se acrecienta la certeza de que la pasta, y el contrato cumplido, están detrás de la repentina marcha de El Niñato. Baste ver la tremenda, y absolutamente sin precedentes, filípica que dedica la Gazzetta dello Sport al belga, tan brutal que el autor, el palanganero Pier Bergonzi, incluso ha recibido críticas de la misma Mafia periodística a la que pertenece.

El periódico rosa es el órgano oficial del Giro de Italia, y detrás de esa crítica absolutamente salvaje está la organización de la corsa rosa, pues tanto periódico como carrera son la misma empresa, y el mismo color de maillot y de papel.… Leer más

Un Giro que es la monda

El Giro ha solucionado, en el arco de un solo año, su principal problema: la paupérrima participación, que se traducía en un nulo espectáculo y una carrera decadente, año tras año. El Giro era una carrera en busca de rescate, y lo ha encontrado de manera sorprendente.

Con buena participación se maquilla un recorrido francamente mejorable, que de entrada no ha sufrido grandes alteraciones -recuerden que el Giro llega a modificar la mitad de las etapas presentadas meses antes-, a la espera de lo que suceda dentro de tres semanas en las grandes cumbres alpinas. Para empezar, al Gran San Bernardo, elemento clave en el recorrido de este año, tiene ahora mismo cuatro metros de nieve en la cumbre.

El increíble puerto (2000 metros de desnivel positivo, 21 km. al 6´ 5% de pendiente sostenida) debería ser la tumba del principal favorito en la previa, El Niñato belga que intentará ganar la primera Gran Vuelta con el maillot arcoiris desde Lemond  el Tour 1990.… Leer más