El culpable es Guillén, y siempre lo será

Lo de que la Vuelta sea una mierda no es cosa de este año. Cualquiera lo ha podido ver en ediciones precedentes. Antes de la chapuza de Barcelona hubo la de la “arena de albero”; antes de los tiempos neutralizados en Montjuic just-porque-sí hubo las etapas unipuerto; antes de la gran mierda de la llegada a Oliva hubo Urdax.

Quienes ahora se sorprenden -muchos extranjeros, fuera del corrillo de canapés de Guillén- lo podían haber visto entonces, y callaron; quienes siguen sin decir nada, sin denunciar la sucesiva patraña que es la carrera, es porque están en la rueda del canapé, y tendrán un hijo que alimentar, un amante que mantener, o un depósito que rellenar, o simplemente merecen estar donde están. A ver, ¿cómo se explica la mierda de etapa por Valencia?

“Es que el problema es el recorrido”. Mentira. Una etapa llana, como la planteada por la organización, es legítima, necesaria y atractiva.… Leer más