Contador coquetea con el espíritu de Pantani

Contador coquetea con el espíritu de Pantani

Hoy se reanuda la competición en el Giro de Italia, a punto de encarar sus últimos cinco días de competición, más el día que el ciclismo pierde para vindicarse como deporte, y que conocemos como etapa final, o  paseo final para ser más exactos. Tras el experimento del año pasado en Trieste, que intentó algo diferente, la organización ha vuelto a Milán y las vueltas sin sentido. Es por este motivo -cinco etapas, sólo cinco etapas- que pasar a narrar las últimas tres etapas del Giro produce algo de vértigo. Porque todas lo tuvieron.

Una etapa totalmente llana y de 150 km. entre Treviso y Jesolo, un pueblo de tumbonas y sombrillas en el tómbolo que cierra la laguna de Venecia por el norte, no parece muy apasionante, y menos con la incesante lluvia que ha acompañado a los ciclistas en la segunda semana de carrera, y que seguro traerá alguna consecuencia en la montaña.… Leer más

Contador de trolas

Contador de trolas

Decía el debutante Rubén Fernández -de momento muy anónimo en la carrera- que del Giro le habían contado como característica destacada “lo largo de los traslados”. Fue así siempre, y llegó al paroxismo durante la demencial hégira de Zomegnan-Acquarone -recuerden cuando se bajó a Sicilia para una única etapa, hace un parpadeo en una carrera centenaria-, pero en la edición 2015 los recorridos están encadenados uno con otros, y hasta son lógicos y consecuentes. Ya verán como enlazan bien las últimas etapas de la carrera, y con el hilo conductor de la geografía y los dramas de Alberto Contador.

El pelotón salió de Liguria al quinto día, en una etapa que prometía mucho -¡el primer final en alto!- y que quedó en bien poco. Llegó la fuga, y el más fuerte fue un esloveno de 23 años del Lampre llamado Jan Polanc, que subió el Abetone de manera bastante admirable, regulando muy bien y sabiendo que no tenía rivales: baste decir que el segundo, a más de minuto y medio, fue Chavanel, que entró con los favoritos de la carrera y quiso completar un puesto de honor en su debut en el Giro a los 36 años.… Leer más

Enfermos y drogados se disputarán la victoria en el Giro

Enfermos y drogados se disputarán la victoria en el Giro

Para lo que va a ser el Giro 2015 sigue siendo válido el análisis efectuado cuando la presentación del recorrido, allá por octubre del año pasado. En contra de lo esperado, la decisiva crono de 59 km. no se ha modificado, aunque Contador ya ha dicho que le parece “más llana de lo que creía”. En el Giro, que para muchos es la mejor de las grandes pase lo que pase, la clave siempre está en la participación.

Este año no es excesivamente penosa en cuanto a aspirantes a la victoria final, pero si lo es en todo el resto de escalafones. Los sprints solo llegarán en la segunda semana, el Tour cada vez concentra más intereses y la Vuelta está muy bien en septiembre, cuando llegan grandes corredores que, por sus compromisos en abril, al Giro ni se han acercado nunca, ni se acercarán jamás.

La penosidad del Giro, reflejada en el titular, viene por la trayectoria histórica o reciente de los aspirantes a la victoria final.… Leer más

Zakarin como síntoma, Joaquím Rodríguez como enfermedad

Zakarin como síntoma, Joaquím Rodríguez como enfermedad

Joaquím Rodríguez, el corredor de 36 años que no empezó a despuntar hasta los 30 años, siempre cuenta que la carrera de sus sueños es la Lieja; si existe otra carrera que le gusta mucho es la Vuelta al País Vasco, aunque nunca lo haya dicho abiertamente: en aficionados corrió en el Iberdrola, y conoce como un local las carreteras y los localismos de la geografía vasca. Ha ganado el GP Amorebieta, ha sido segundo en San Sebastián, y este año ha ganado a su provecta edad la Itzulia.

En el ciclismo que cambia no sorprende nada el último triunfo de J. Rodríguez. Es irrelevante que anteriormente solo hubiese ganado tres vueltas por etapas (una Vuelta a Burgos y dos Voltas, estas últimas sin crono) en toda su vida deportiva; es irrelevante que lo haya hecho tras una exhibición difícil de catalogar en una crono final de 19 km.; es irrelevante que no haya habido bonificaciones; y, por supuesto, es irrelevante que lo haya conseguido en un equipo que arrasa allá donde va, y que en esta Itzulia tenía a tres corredores entre los diez primeros antes de la última etapa.… Leer más

B-o-o-o-nen de Flandes

Botella-Trofeo de campeón-Flores

Como lleva una temporada incomensurable, para leer los elogios a Boonen basta con remitir a las entradas de su victoria centenaria, la de Harelbeke o la de G-W: es el mejor corredor de la historia sobre el pavés, y el simple hecho de que sólo hubiese ganado dos Tour de Flandes no cambiaba en absoluto el balance.

Ganar un tercer Flandes entraba dentro de lo posible, pero últimamente se viven tiempos de sorpresa en los monumentos (Goss, Nuyens, Van Summeren, Zaugg, Gerrans) y al gran, gran Tom Boonen ya le habían pasado varias jugarretas en la mejor carrera de Flandes, especialmente las realizadas por aquel corredor efímero que fue Devolder, que ganó dos veces el monumento precisamente por ser compañero de equipo de Boonen.

Como he comentado en otras ocasiones, a mí el Tour de Flandes no me gusta especialmente. Es una carrera que frecuentemente se salda con sonoros bochornos -la edición 2004 con Wesseman, o la 2007 con Ballan- y un sufrido aburrimiento por parte del espectador y a la que los organizadores han dado una vuelta de tuerca en este 2012 de manera forzada, contranatura y con resultados realmente estúpidos.… Leer más