Criterium du Van Aert
Van Aert ha monopolizado las cuatro primeras etapas del Dauphiné, donde perfectamente podía haber ganado en todas las ocasiones. Como en el fondo y la forma tiene algo de conformista y de segundón -se repite ya demasiadas veces, y en demasiadas grandes citas- únicamente ha ganado una etapa. Lo que sigue es el resumen de una forma de perder elogiable, pero sin dejar de ser una forma de perder.
El primer día fue el más fácil. Eliminado el único sprinter presente en la carrera, el voluntarioso Groenewegen, el campeón belga no tuvo dificultad para ganar el sprint a Hayter, Quinn, el neoprofesional Page (ponga un Intermarché en cualquier salsa, siempre triunfará) o la Momia Noruega Boasson-Hagen, porque tal es el nivel del actual Dauphiné.
Es tan pobre el nivel que, en la aproximación al sprint de la segunda etapa, la realización francesa se recreaba en señalar con las infografías la situación en carrera de Van Aert y Stuyven, que no gana un sprint masivo desde hace lustros.… Leer más