Ulissi inhala la victoria
Se esperaba mucho de la primera etapa en suelo italiano del Giro de Italia, y ha colmado en gran medida la expectativas. Disputada a casi 42 km/h de media durante 200 km., hubiese sido un espectáculo mayor de no ser por la realmente horrenda retransmisión de la RAI, que impidió ver los momentos decisivos por una sencilla razón, que hunde sus razones en las mismas características del evento.
Se salió de Catanzaro, la ciudad en la que en 1996 el ultradopado Pascal Herve (y después con pisos francos para dopar a ciclistas) obtuvo la etapa y la maglia rosa, y por la que rara vez para el Giro, puesto que está en el profundo sur. Hasta el indecible Cancellara, cuyos padres son de la cercana Basilicata, decía que nunca había estado tan al sur de Italia…
El día anterior los ciclistas habían aterrizado en el aeropuerto de Lamezia Terme, ideado para atraer turismo a Calabria, y que básicamente se nutre de la diáspora calabresa por el mundo.… Leer más