Van der Hoorn, del retiro al triunfo
De manera imprevista, ha llegado una escapada en un día normal de gran vuelta. Una escapada de 190 km., porque 190 km. tenía la etapa y la fuga se formó como siempre: en el primer kilómetro, sin batalla, sin grandes grupos, sin grandes nombres. La única excepción es que había grandes rodadores (como Gougeard), especialistas en la fuga (como Pellaud) e incógnitas que se demostraron acertadas.
La primera parte de la etapa transcurría por el Monferrato, una zona de colinas que se alzan en el rango de los 100 o 200 metros sobre la depresión del Po, y la segunda parte y final, por la zona de Le Langhe, donde el rango asciende a entre 300 y 400 metros de altura, y donde estaba concentrada la dificultad. Los fugados llegaron a esa zona con una ventaja de 3´30″, demasiado poco como para esperar en la sorpresa.
En el grupo tiraba el Bora, haciendo la labor tradicional que hace el equipo para favorecer los intereses de Sagan, y que en el pasado le ha procurado alguna etapa en el Tour.… Leer más