Triste final de Tour

Triste final de Tour

La segunda y última etapa de los Alpes quedó jibarizada de 130 km. a 95 km. porque un brote de peste vacuna en el alto de Saisies amenaza la caravana, no se sabe si con una zoonosis, o con agrios ganaderos cortando la carretera porque las instituciones sanitarias iban a sacrificar su cabaña, cuando ellos creían que estaba perfectamente (da igual cuando leas esta última frase).

Dejando aparte las innumerables metáforas e implicaciones que se podrían sacar de este suceso, la etapa fue un horror, como indica su distancia, la falta de fuerzas de los ciclistas, y su incapacidad para plantear algo diferente. No paso absolutamente nada, salvo en dos implicados.

El primero de ellos, el gigantesco Primoz Roglic. Provocó, otra vez más, el corte para la fuga del día y, subiendo el Col du Pre (hipocresías De Andrés estaba asombrado de su dureza y belleza, había olvidado las ascensiones en 2018 y 2021) ya se fue en solitario tras quitarse de rueda a Paret-Peintre.… Leer más

No ha estado nada mal este Ventoux

¿Quería ganar la etapa de hoy Pogacar? Sí, sin duda. Solo así se explica el control férreo que impuso Politt en el inicio de la etapa. Se había formado ya una fuga mierdera con la que pretendían pastorear el día (dos Tudor y otro corredor más del montón) y el gigante alemán se dedicó a amedrentar a cualquiera que lo intentase.

Lo intentó Romeo, dentro de la estrategia canina, y recibió una bronca monumental. Debió servir, porque cuando se formó otro corte con los habituales treinta y pico corredores, el joven vallisoletano no estaba. Era su terreno, era la etapa que tenían marcada como equipo, pero las amenazas habían surtido efecto. 

¿Recibirá sanción Politt al respecto? No, porque al revés de Moscon -si, está corriendo el Tour- hace unos años, no cerró a ningún corredor, ni alzó el puño soltando el manillar. Hasta en eso es sutil la Mafia.… Leer más

En la era del Rey Sol™

En la era del Rey Sol™

Las caídas de la primavera habían mermado la participación en las carreras previas, y la Lieja 2024 no iba a ser una excepción; además, acudía el Rey Sol, ganador en 2021, y con cuentas pendientes en la carrera a pesar de esa victoria.

Cuentas pendientes porque en 2022 no quiso salir porque se había muerto su “suegra” -la madre de su pareja-, y el año pasado se cayó antes de la parte decisiva, procurándose una fractura que no le afectó en el resto de la temporada, por mucho que los propagandistas les guste decir lo contrario, y justificar así caídas como la del País Vasco.

Parecía que iba a haber una Lieja de leyenda por el mal tiempo reinante en esa parte de Europa -hay vídeos de nevadas el mismo día de la carrera en las cotas más altas del recorrido-, y una vez más el ciclismo “del espectáculo” acudió de la manera que suele: por la vía del aburrimiento  por avasallamiento.… Leer más

Por fin Almeida

El Monte Bondone, envuelto en una fama pretérita, hace mucho tiempo que no crea diferencias. Hoy tampoco ha sido una excepción, a pesar de las buenas condiciones para la etapa -50 km. en la primera hora, buena fuga, ritmo sostenido, casi seis horas de etapa, 200 km. en total- y la mejor disposición para la batalla de los corredores.

Es un Giro extremadamente igualado entre los tres de cabeza, que ya estaban destacados antes de esta etapa, y que simplemente salen reforzados en su posición; el que más, Almeida, ganador por fin de algo importante; el que menos, un Roglic que ha flaqueado en el tramo final, y que ha minimizado daños gracias al trabajo de Kuss.

En conjunto, ha sido una buena etapa. Solo por ver el magnífico Santa Barbara, en el extremo norte del Lago de Garda, ha merecido la pena. Uno más de los tantos puertos de la zona, con una carretera recién restaurada y que permite el paso de un coche, y con dificultad.… Leer más

Llega una fuga

La etapa estaba marcada como de cambio de liderato, dentro del gran esquema ideado para acabar con el espectáculo que suponían tres semanas de ciclismo, y así fue, pero no fue un cambio de liderato que vaya a dejar muchos días a un líder de paja, o una fuga bidone, o nada que vaya a ir más allá del orgullo personal de un par de ciclistas y un par de equipos.

Así es la realidad. Si la etapa hubiese tenido más de 200 km., como pasaba antes en esta carrera, hubiese sido muy diferente: la fuga, la diferencia, el líder, y sus opciones de cara a la general. Lo sucedido finalmente está bien, muy bien en el actual esquema del ciclismo de los hiperdominadores, y basta. 

Hubo ecos de lo sucedido en 2010 camino de L´ Aquila, pero solo eso: ecos. Se compartía el frío y la lluvia, y los 260 km.Leer más