Desde el Mortirolo se ve Verona

La etapa del Mortirolo no ha sido la mejor del Giro, e incluso tendrá que esperar al final de la carrera para saber si está entre las tres mejores. Ni ha sido buena, ni ha sido decisiva, ni ha tenido ningún tipo de aliciente para algo tan cacareado y, hasta cierto punto, esperado por los aficionados, incluso después de la supresión del Gavia.

De salida se montó otra fuga de ventitantos corredores a la que el Movistar tuvo siempre a la distancia exacta de 4´40″, para después dejarla ir hasta los 6´ a las faldas del Mortirolo. De manera increíble, acabó llegando a meta, después de únicamente perder 2´ en la mítica subida, que por primera vez desde 2003 se ha afrontado con lluvia y frío.

Una fuga donde el equipo del líder había metido a Amador, el Astana a tres corredores (Bilbao, Villella y Hirt), el Bahrein al fratello y Caruso -felizmente recuperado de su cagalera, y tanto-, el Mitchelton a Nieve con un gregario, Roglic a su valioso Bouwman, y el líder de la montaña, el italiano Ciccone.… Leer más

Blancazo de Landa cuando buscaba el rosa

Tony Rominger se planteó la temporada 1994 como la del asalto definitivo al Tour de Francia. El año anterior había sido segundo, ganando tres etapas: dos por la magnificencia de Indurain, y otra, la que le dio más alas, la crono final. Se presentó en la línea de salida con ese aval, y el de tres Vueltas a España consecutivas, además de una preparación específica de dos meses en Colorado (EE.UU). Pasada la primera crono, el suizo preparado y evolucionado por Michele Ferrari, se quedó en una etapa de llano, abandonando antes de la montaña.

De ese momento queda una de esas grandes frases que produce este deporte de vez en cuando: “Rominger Colorado, Indurain Amarillo”.  25 años después, incluyendo caso Festina, fiambre de Pantani, Operación Puerto, T-Mobile, UsPostal, Phonak y lo que quieran añadir, seguimos exactamente igual, hablando de colores: Landa iba a por el rosa del Giro, y se ha quedado blanco.… Leer más