Un gran Giro (y lo que viene)

Para el etapón de ciclismo que se vivió ayer en el Giro hacía falta el ingrediente básico del ciclismo, que es resistencia. Doce días de competición seguidos llevaba la carrera merced a la herencia de Zomegnan, la estúpida excursión a Dinamarca y el día de descanso el cuarto día.

Hasta Ventoso, un corredor experimentado, reconocía que jamás había hecho doce días de competición seguidos. Aparte de lo ya recorrido y comentado, los ciclistas habían acumulado en los últimos días etapas de esas de “transición”, como por ejemplo la que ganó Roberto Ferrari con 242 km. y 6h 30´ en la bici. Ganó por el desorden de una caída -Cavendish tuvo que frenar y sólo fue cuarto- y porque el rival era Chicchi, el supuesto sprinter treintañero que jamás se había colado entre los tres mejores en el sprint de una gran vuelta.

También porque recorrió toda esa distancia, claro, y ha seguido ganando porque es de los pocos sprinters que no se han ido a casa antes de la primera etapa de montaña (Goss, Demare, Haedo, Renshaw, Lancaster, Bonnet), o no han tenido la connivencia de los jueces tras dejarse remolcar en etapas que no eran de montaña, como Cavendish.… Leer más