Pogacar extermina el Dauphinè
Si ya empezó ganando la primera etapa, ¿qué decir de las dos últimas etapas de Dauphine, reducidas a dos excursiones de 130 km. cada una, no vaya a ser que se nos agote la fiera? Pogacar ganó la primera, y no quiso ganar la segunda por…por…pues por lo mismo que hizo el sábado.
Se subía la Madelaine, la Croix de Fer por el Glandon, y final subiendo el Telegraphe y, poco antes de coronar, desvió a un valle paralelo al de Valloire, para una subida muy tendida y prácticamente inédita. No pasó nada, absolutamente nada.
Reflejo de eso fue ver a Pogacar, líder de la carrera, haciendo de aguador antes de la subida al Telegraphe. ¿Hacía falta? No, pero tal es la sobrada con la que este corredor se pasea por el calendario y delante de sus rivales. Por supuesto, le llovieron los elogios de los habituales de siempre, cuando la situación era ridícula para la “jornada reina” -qué poco dice eso ya-, y para un ciclismo supuestamente competitivo.… Leer más