Agua, frío, montaña: Basso
Todos los ciclistas italianos conocen el San Carlo, a pesar de que la última vez que se subió en competición profesional fue en 1972. El puerto, una golosidad para cualquier escalador, es una cita fija de la que hoy por hoy es la prueba para aficionados más competida del mundo, el Tour del Valle de Aosta. Duro a nivel del Joux-Plane, el que corona gana, y Leonardo Piepoli ha aprovechado la ocasión para obtener una de sus mejores victorias. ¿El resto de corredores? Apagón generalizado, salvo en Basso y Quique Gutiérrez.
La escapada que ha devorado el falso llano que lleva a la región autónoma italiana sólo contaba con un elemento de peligro, Marzio Bruseghin. Aún así, el CSC no dejado ningún atisbo de esperanza y los han neutralizado poco antes de empezar el temido San Carlo. Las primeras rampas, las más duras, han producido una escabechina en el pelotón, sometido al fuerte ritmo de Cuesta y Sastre.… Leer más