Una Vuelta que hay que completar con la imaginación
Por una vez la Vuelta de Guillén se ha acercado a la fronteriza, aislada y despoblada comarca de Zamora donde el Duero pasa a Portugal, una zona que estuvo de moda durante el franquismo por la sucesiva construcción de embalses para la producción de energía eléctrica. Durante su construcción la zona se convirtió en un El Dorado, para después volver a lo que ha sido siempre: un territorio tan agreste que nadie se acerca por ahí.
La Vuelta por lo menos ha honrado el paso, e incluso incluyó en el recorrido la subida a un pequeño puerto, algo muy raro en sus anteriores pasos por la provincia, incluyendo el muy recordado de 2008. La fuga del día solo tenía dos integrantes, y menos mal que al primer ataque de Ezquerro se unió después el portugués Machado, porque la primera reacción fue dejar solo al corredor español.
Machado siempre acostumbra a ir en fuga cuando no tiene un líder sólido por el que trabajar, y este parece ser el caso de Zakarin en esta Vuelta.… Leer más