Llamándose HumanPlasma….
La televisión pública alemana ARD ha investigado una noticia de la semana pasada relativa al doping sanguíneo. Al parecer, se había descubierto que una clínica vienesa de nombre HumanPlasma trataba a 30 deportistas de élite. La pista la puso la huída, con pies en polvorosa, de gran parte del equipo austríaco de esquí de fondo (ese deporte con tantas similitudes con el ciclismo en cuanto a resistencia) en el truño de JJ.OO de Turín 2006. Por supuesto, una de las medallas se las llevó otro DiCenta, pariente de Manuela DiCenta, el primer éxito de Michelle Ferrari, pero esa es otra historia. Dicen que al menos 20 deportistas son alemanes. Y hay ciclistas.