El argumento ya ha salido aquí repetidas veces: para que en el ciclismo pasen cosas tiene que haber distancia. La Sanremo es una carrera que desespera a los true believers del ciclismo -la mayoría de ellos, de aluvión- porque aparentemente no pasa nada, aunque haya distancia. En realidad, pasan un montón de cosas que difícilmente se traducen en esa concepción de espectáculo que ha ido formándose en los últimos tiempos: el momento youtube, el buenos contra malos, el un puntito de más.
Con toda seguridad, nada de lo que pasó en los últimos ocho km. de esta edición de Sanremo hubiese sucedido de no haber habido antes 286 km., la mayor parte de ellos bajo el agua y frío. Eso, y el viento de cara, hizo que la media de la carrera fuese la más baja en décadas, propiciando asimismo una resolución de la carrera que no se veía desde mucho tiempo atrás. 1994 desde el último triunfo con un ataque en solitario en el Poggio, 1989 desde que un corredor con el Tour en su palmarés no ganaba la carrera.
¿Edición histórica? Sin duda, pero también una Sanremo horrible porque se subió la Cipressa sin un solo ataque, todos cómodos tras el ritmo de un FdJ que salió a ganar, y que demostró que Demare sube ese puerto igual de bien que lo hizo en 2016, cuando dos italianos inferiores y envidiosos quisieron mancillar su victoria. Es la Sanremo la que escoge sus ganadores, y rara vez se equivoca. “Una lotería”, se decía en este país hasta que Freire ganó tres veces la carrera.
Esa lotería se vio muy claramente el sábado. Los estajanovistas de esta carrera nos tragamos toda la emisión y, aunque a veces flaquee nuestra fe, siempre acaba compensando. Merece la pena ver cómo, a 80 km. de meta, Sagan se dedicaba a hacer cucamonas a la cámara, como si estuviese disputando un criterium y no una carrera que acabará rogando ganar. Es mas: en la salida de Milán había accedido a varios agasajos perfectamente prescindibles, porque vive para esto y no para ganar carreras. Hasta ha llegado a decir “lo importante es el espectáculo”, como el Séneca de Pinto.
En el colmo de la estupidez, a la que ya se están acostumbrando incluso sus fans más acérrimos, intentó ganar la Sanremo con palabras impropias del ciclismo, a la manera del fútbol y sus previas: que si Kwiatkowski había sido un chuparruedas, que si a él le hubiese dado vergüenza haber ganado así. A la hora de la verdad, Sagan disfrutó por una vez de un equipo, y falló estrepitosamente. Como siempre, pero esta vez acompañado.
La aproximación a la carrera del vencedor fue completamente diferente, y ahí se encuentra gran parte de su éxito. Último italiano en subir al podio (2012), había puesto sus objetivos de la temporada en Lieja, Tour y Mundial. En ningún momento citó la carrera más querida, la misma en la que ha atacado cuatro veces en el Poggio, y había completado una Tirreno en la que ni siquiera se había movido en la etapa de Filottrano que homenajeaba al mejor gregario que jamás haya tenido.
Era parte del plan, ejecutado a la perfección y con no pocas dosis de suerte y oportunismo. Los capi solo habían dejado fuera a Kittel, la Cipressa fue coronada por gente como Kluge (del Orica, gasolina súper) y nadie, nadie se movía. El único que lo hizo, y para evitar un spartitraffico, fue Cavendish, con consecuencias nefastas para sus aspiraciones de costilla rota y TUE ad-hoc.
Un horror de carrera, como ya dicho. Entonces sucedió todo, un condensado y al mismo tiempo destilado de todo lo que en el ciclismo puede suceder. Burghart ataca en la base del Poggio, quizás preparando un salto de Sagan. En el grupo se pone a regular Mohoric, del Bahrein, supuestamente controlando para Colbrelli, y el que salta es J.P Drucker, otro peón de gran favorito.
Ha pasado la mitad del Poggio. De ese Poggio y de esa Sanremo. Normal que se tambalee la fe, incluso de los más creyentes en esta carrera. El despiporre total fue cuando el siguiente ataque fue protagonizado por Krists Neilands, el campeón letón de 23 años, corredor del Israel, y ya en fuga en Tirreno-Adriático. Como una centella Nibali se fue a su rueda, mientras su equipo seguía en cabeza y hacía como que controlaba, cuando en realidad lo que hacía era dejar margen al salto.
Una estrategia perfecta, pero que hubiese sido fallida si Nibali se hubiese engolado la boca en días previos, o si se hubiese colocado como favorito haciendo algún número en Tirreno. Si alguien como Nibali sale a por alguien como Neilands no es para controlar un sprint de Colbrelli, es para ganar. O, dicho de otra manera y desde la óptica de los que se quedaron en el pelotón, al ataque de un líder tiene que salir un líder. De primaria de ciclismo.
Nadie lo hizo. Por increíble que parezca, y teniendo en palio una de las mejores victorias que puede tener un ciclista. Ataca Nibali y todos esperando a ver que hace el otro. Evidentemente, y el siciliano ha dado buenas muestras a lo largo de su carrera, aprovechó su oportunidad. Neilands aguantó lo que pudo (y lo explica de manera muy solvente), y después Nibali se acopló en su postura aereo para coronar el Poggio con 9″ y emprender el scolinamento.
En el grupo tiraba Oss, y había un montón de corredores y gregarios de líderes. Nibali baja muy bien, pero Sagan lo hace mucho mejor. Aún así, acabó el descenso con la misma ventaja que había logrado en la cima. Comenzaba otra Sanremo, la de la lucha agónica de los 2´3 km. hasta llegar a Vía Roma. El único que intentó enlazar con el corredor del Bahrein fue Trentin, otro Orica, y se quedó a medio camino para ser reintegrado por un grupo donde Quick Step tiraba con todo para un sprint masivo. Si Trentin hubiese tirado del grupo, el ganador hubiese sido un compañero.
En la narración de la RAI los locutores imploraban non voltarti, sabedores de lo exiguo de la ventaja de Nibali, de la triste imagen de un corredor que perdió la Lieja 2013 en circunstancias parecidas. O la Vuelta 2013. En ningún momento, quizás oyendo las voces de la multitud enardecida, o quizás sabiendo bien como debía ser la jugada que había imaginado y ejecutado casi a término, miró hacia atrás, solamente cuando a 50 metros de la meta se vió vencedor, dejando la imagen más bonita del ciclismo: cuando uno levanta los brazos y el primero de los perdedores todavía está sprintando.
La Sanremo es la emoción del ciclismo, y así se ve en el vídeo nada más cruzar la meta. Incluso una edición tan deleznable como la vivida hasta la mitad del Poggio es mejorada por una de las figuras actuales del deporte, y da igual que fuese una figura: es la manera de ganar, al ataque y sin esperar a nadie, lo que emociona de una victoria así.
Ni siquiera con el triunfo en la mano quiso confirmar que ese era el plan. A pesar de que en la Cipressa había adelantado a cinco corredores de una tacada para ir en cabeza, por si se formaba una fuga. No, insistía en que el plan era Colbrelli, octavo del sprint del grupo. Menudo plan, como si todos los grandes vueltómanos de la historia de Italia no hubiesen ganado alguna vez la Sanremo, y aquí es el momento de decirlo: es la Sanremo la que hace grande a Nibali, porque Nibali no puede hacer grande una carrera que ya lo era.
Cuatro de los últimos cinco ganadores en Vía Roma tenían 26 años. Nibali tiene 33, muy trabajados, porque desde 2013 gana o bien un monumento, o bien una gran vuelta. Tres veces ha hecho podio una misma temporada en dos grandes vueltas. Ha roto todas las estadísticas y tendencias históricas de la carrera, y lo ha hecho sin cifras sobrehumanas: los expertos en cálculo inferencial de potencia dicen que no pasó de los 6w/kg en el Poggio, y aún así desde Furlan y la #EPOGoldenAge no se veía algo así.
De la historia de este corredor vinculado íntimamente a Ferrari y a remolcarse de los coches poco más se puede decir, porque todavía parece que tiene algún otro gran triunfo al alcance. Y, si no es así, es capaz de hacerse la acupuntura y ganar en dos etapas un Giro en donde estaba en cuarta posición a tres días del final. El ciclismo es muy bonito en días así –La Primavera– pero no hay que olvidar de qué está hecho.
El último mérito de Nibali, que ganó porque atacó, es que ha evitado un apestoso triunfo de Ewan. El sprinter tasmano ha sacado varias bicicletas de ventaja a Demaré, cuando es un corredor que raramente pasa de la primera semana de una gran vuelta, incapaz de subir con los mejores tachuelas, y que no se le ve en sprints de etapas de más de 200 km, cuando las hay. Pero así es Stephens, el director ex-ONCE y ex-Festina. Su increíble puesto se parece mucho al conseguido por Alan Davis en 2007, y esperemos que tenga la misma continuidad.
Cuarto ha sido Kristoff, un habitual del top-five en la carrera, y que en París-Niza se descolgó en la segunda etapa en el llano, para entrar justo por delante del coche escoba. De esa enfermedad viene este relativo éxito, en una parábola muy habitual en el ciclismo. Quinto Roelandts, sexto Sagan, séptimo Matthews con un único día de competición y cerrando el grupo, en el puesto 19º, un Viviani que iba a cámara lenta,igual que Petacchi en el sprint de 2004. Así es la Sanremo. Para el próximo año solo tiene que fichar por un equipo australiano, y ya verá como llega pieno di potenza tras 291 km. Porque en el Quick Step no vuelven a hacer esto por el sprinter-b del equipo nunca jamás.
Con Nibali la Sanremo vuelve a los grandes héroes de la ruta, por primera vez en 29 años. No durará mucho ahí, salvo que Dumoulin y gente parecida vea bien la carrera y piense que lo que ha hecho Nibali bien lo podría haber hecho en 2017, cuando fue el más fuerte en el Poggio: si un rodador corona con 10″ es suficiente. O, simplemente, hay que atacar para ver que es lo que pasa. Y no mirar nunca atrás.
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El siempre sibilino Gómez Peña traza este perfil de Enric Mas.Son las palabras engoladas de siempre de este bardo bilbaíno, y simplemente pongo el enlace para que se lea lo de “No me quiero parecer a nadie. Prefiero que alguien en el futuro quiera ser como yo”
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Considerando como es la zona, el proyecto de carril-bici debería ir bajo techo, para intentar paliar los efectos de la horrorosa contaminación industrial, más allá de lo concebible.
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Álvaro Hodeg es un neoprofesional colombiano que acaba de estrenarse en Handzame Classic y que ha remachado en su primera carrera WT, la Volta a Cataluña. Ganó el sprint de manera muy solvente, y poco después se pudo leer en esta noticia que es hiperactivo, la enfermedad de moda entre los deportistas (y también entre los psicólogos), porque su tratamiento más normal es vía una medicación dopante.
En fin, ya lo dijo la gimnasta menor de edad cuando salió su TUE gracias a Fancy Bears
Having ADHD, and taking medicine for it is nothing to be ashamed of nothing that I’m afraid to let people know.
— Simone Biles (@Simone_Biles) 13 de septiembre de 2016
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Iba a pasar antes que después, y así ha sido: sin estar operativos, simplemente “en pruebas”, un coche autónomo ha asesinado a una ciclista. Ha sido en Arizona y vendrán más, muchos más, porque el fin será expulsar a los ciclistas de las carreteras.
Tenía ganas de leer tu crónica para volver a la realidad. El final fue tan emocionante, con una resolución tan magnífica, que necesitaba volver a pisar el suelo. O como bien has dicho: “El ciclismo es muy bonito en días así -La Primavera- pero no hay que olvidar de qué está hecho”.
Yo no diría Sanremo horrible. La mayoría de los años es así… y aún así, siempre deja alguno de los mejores momentos del año. Vamos, que mejor 285 kilómetros de desgaste y gran ciclismo al final, que el “espectáculo” a la manera Contadoriana. Es cierto que a veces da un poco de pena no ver ataques ni movimientos, pero parafraseándote, no son los corredores los que hacen grande a la Sanremo, sino esta la que engrandece a los corredores.
Sobre Nibali, es ese corredor bipolar que tanto da ganas de celebrarlo como de abominarlo. Podríamos llamarlo Fausto Nibali, en parte por Coppi, en parte por Goethe. Ensució un poco el triunfo con la porquería esa de dopado de decir que su mujer le había prometido un Porsche, que tanto ha gustado a los medios anglosajones, que lo han puesto como cabecera de sus noticias. Ya tiene Nibali un Porsche, para acompañar al Ferrari que lleva con él durante años… Una Sanremo se gana porque es un monumento, meter lo del Porsche es humillante.
En fin, a mi esta carrera me gusta como es. Y aunque no hubiese atacado Nibali y hubiesen subido el Poggio a ritmo-control (como Paolini hacía para Kristoff) hubiésemos visto un sprint memorable en Via Roma, que a lo mejor no ganaba Ewan, ya que como se suele decir, los grandes velocistas no sprintan igual por el segundo puesto como por el triunfo. El tasmano sí, porque no es gran velocista y está ávido de acumular puestos en carreras importantes.
Ewan hubiese tenido de lanzador a Trentin. Hubiese ganado de todas-todas, vista la ventaja. En cuanto a carrera horrible, otro dato: entre Cipressa y Poggio estuvo tirando un mismo tío.
Hubieras visto tan abominable que Ewan hubiese ganado? Es verdad que es un sprinter al que las vueltas de tres semanas se le hacen eternas y se suele ir a casa la segunda semana, pero en una carrera como San Remo, es un esfuerzo muy concentrado en un día. Tiene mucha musculatura y muchísimo gasto en el sprint, pero tiene un estilo muy particular en el sprint que lo hace vistoso. En una gran vuelta, tiene dos o tres balas como mucho para gastar en dos o tres etapas, en cuanto las gasta, se le acaba la gasolina y se va para casa. Es un sprinter que necesita una alineación de factores, no es nada regular, pero el sábado tuvo el día.
Por cierto, hay un momento en el que Trentin parece que va a coger a Nibali, pero se repente se desinfla y lo absorbe el pelotón. Con Trentin guiando el pelotón, yo también creo que hubieran alcanzado a Nibali.
Que Ewan hubiese ganado, pertenece al ciclismo-ficción, lo que la experiencia demuestra es que no se esprinta igual por ser primero que por ser segundo.
Respecto a lo de que Ewan se desinfla tras las primeras semanas de grandes vueltas, a mi no me molesta tanto. Les pasa a muchos velocistas. De hecho, nunca vi un caso más grotesco y lamentable que lo que hizo Demare en el último Tour de Francia, donde su propio director aseguraba que no es que estuviese enfermo, sino que le habían cansado los sobreesfuerzos. Nunca un esprinter se arrastró de tal manera. A mi me encanta Demare, pero ahí dio mucho miedo. Así que si se lo acepto a Demare, también se lo aceptaré a otros.
Cipollini creo que acabó tres grandes vueltas en toda su carrera…
Cipollini solo fue capaz de acabar algún Giro, y estoy seguro que en su día lo ayudaron a subir los puertos enganchado a coches. Cipollini era uno de los ciclistas más mediáticos del momento y supongo que al Giro le interesaría que llegara a Milán. En el Tour la cosa cambiaba, y estaba a tope la primera semana, y la primera de montaña solía irse para casa.
Y creo que fue al final de su carrera, cuando iba a tope de droga y agarrado a los coches, con el único objetivo de batir el record de Binda. Es increíble que el Giro se humillase de esa manera, favoreciendo a que el Rocco Siffredi de la bicicleta batiese un record de una de las leyendas más grandes del deporte italiano.
Yo si alguien no es capaz de terminar una gran vuelta, pues que no la termine. Debería ser un esfuerzo extraordinario no al alcance de todo el mundo, y eso no te invalida para ser ciclista. Sin dopaje, ayudas mecánicas, trascoches y organización tramposa (permitiendo fueras de control intolerables), sería realmente extraordinario, un reto magnífico, terminar una gran vuelta, por lo que tampoco se puede considerar una humillación no hacerlo.
No, al menos en el primer Giro de Indurain ganó la ciclamino, y creo que también en el primero de Gotti.
hm, no recordaba ese de Induráin… me suena uno más tardío donde incluso en sus declaraciones decía eso de estar mejor que nunca y que quería conseguir la general por puntos…
pero es igual, no me parece ningún demérito. Otro que se va mucho a casa es Greipel y nadie niega que es uno de los más currantes y sacrificados del pelotón.
Nibali, un gigante que hace de este deporte el mas bonito de todos.
Pero…sabiendo lo poco que te gustan las trampas y la omertá, ningún comentario sobre su trasmoto(s) en la parte alta, la mas llana, del Poggio?? Sin esa ayuda tu relato no habria existido.
Grande Nibali, su ataque y su inconformismo
Nada que comentar entonces?
Pues aquí bien que se lo reprochabas a otro, claro, que es Contador (y bien merecido que lo tiene el vegetariano):
http://ciclismo2005.com/2017/09/froome-consigue-ganar-la-vuelta-al-sexto-intento/
Estoy de acuerdo con la mayoría de tus opiniones sobre ciclismo, y Nibali es un regalo para los aficionados, pero lo que pasó en el Poggio no deja de ser parte de la Mafia, y callarse ante ello, no deja de llamarse Omertá.
Gracias por tus artículos, y por hacerme disfrutar de esta carrera, que antes no sabía valorar.
Un saludo
Por cierto, no se suponía que en esta carrera empezaban a usar el VAR?
http://www.mundodeportivo.com/ciclismo/20180316/441566589250/el-var-llega-al-ciclismo-en-la-milan-san-remo.html
Pero claro, estamos en Italia, y es Don Vito Nibali el que gana :o)
Yo es que no he visto la moto tan descarada como en otras ocasiones, pero tampoco me extrañaría. Volveré a ver el final.
Qué post tan bonito de un gran sábado de ciclismo. Si bien recuerdo, los últimos cinco finales de la Milan San Remo han sido trepidantes (en 2015 los últimos 30-40 km nada menos), y ahí entra en juego por supuesto la distancia.
Qué gran parábola puede establecerse de un ganador como Nibali con otro ganador desaprovechado como Valverde para este monumento.
Otro buen post, que estaba deseando de leer.
Soy muy muy de Nibali y aunque nunca se puede poner la mano en el fuego por nadie y Nibali tiene cosas oscuras en su historial (Ferrari, el giro que les ganó a Chavez y Valverde en las últimas etapas despues de pasar casi toda la carrera bastante justito, aunque atacando con lo que podia, con un poco de vitamina extra por ser italiano y del astana…) creo que es un corredor bastante creible y con rendimientos no super fuera de lo normal
Me explico:
No corre o aunque sea no disputa mil carreras durante la temporada. El último giro que gana creo que viene del tour de croacia y sin ganar. En el tour que ganó Vinokourov le amenaza porque no llevava ninguna victoria hasta entonces…
Muchas victorias las ha conseguido a base de tactica y ataques en el momento justo, descensos arriesgados (que tambien le han supuesto caidas en momentos importantes como las olimpiadas o la última vuelta), tecnica, saber moverse en el pelotón, leer bien el desarrollo de las etapas…
Y muchas veces sin ser el mas fuerte pero si un tio valiente.
Aparte de todo lo que he explicado me gusta como no abandona la historia del ciclismo y todas sus variedades:
La etapa del paves en el tour que gana, Lombardia, Lieja, Sanremo, mundiales, olimpiadas, grandes vueltas…
Y cuando no gana, no nos cuenta mil excusas!
no merece la pena hacer esos ejercicios de autoengaño. Hablamos de un ciclista que ha ganado bastante en un contexto donde la droga es la norma, y al que además se le relaciona continuamente con la trampa (sus médicos, sus equipos, sus compañeros de viaje, su trascoche en la vuelta). Lo que veo bueno en Nibali que no veo en la mayoría es que su forma de correr no está tan determinada por la gestión de esfuerzos que impone el ciclismo de los marginal gains y las mediciones del doctor Ferrari. Nibali ha ganado mucho a base de aprovechar circunstancias no determinadas por la droga, sino por el talento, la improvisación, la sorpresa y la buena táctica. Su triunfo en el Tour de Francia lo cimenta en la etapa que gana en Inglaterra y luego en la de pavés, luego se retiran Contador y Froome, pero ya iban con el pie cambiado gracias al plan del italiano. En la Vuelta que gana también monta muchas escabechinas. En el Giro es cierto que tiene un rendimiento irracional, pero es el descenso del Agnello donde provoca el hecho decisivo. Igual ocurre en sus Giros de Lombardia, atacando antes de la última cota y aprovechándose de la poca convicción de los rivales.
La sensación que tengo es que Nibali, como corredor de élite que pretende ser, no puede escapar al contexto, pero también su forma de correr, que la mayoría de lo que ha ganado ha sido a base de explotar sus ventajas y minimizar sus debilidades, me hace creer que en otra época del ciclismo menos negra, o en un mundo sin dopaje, también podría ser un buen corredor. Al revés que muchos monstruitos con un historial médico que haría temblar al señor Burns.
Muy de acuerdo con tu comentario. Simplemente por abundar, y que también acrecienta su palmarés: fue gregario de Di Luca en el Giro que ganó y también de Basso en 2010, donde subió al podio como gregario. Son hechos que hablan por sí solos, y más en ese Liquigas radioactivo de Paolini, Kreuziger, Pozzato…todos clientes de Ferrari.
Maxim y Valentin Iglinsky en 2014, Lars Boom en 2015… habría que comprobar cuantos positivos y valores anormales de cualquier cosa han tenido los equipos de Nibali cada año
La etapa de paves en el Tour, por mucho que gustara creo que es de las mayores demostraciones metahumanas de un equipo vistas en elos ultimos años. Encima hecha por corredores con poca o nula experiencia en adoquines.
Lo has clavado al 100%.
Lugar, mi casa. Nibali pasa por la pancarta del último km. Mis palabras a mí padre (espectador muy ocasional de ciclismo) son las siguientes.
-“Un kilómetro y 4 segundos. Papá, le cogen, que estos bichos esprintan a 70km/h”.
Se me olvidó el detalle de que llevan 288 km en las piernas.
Por esto la Sanremo es única. En una vuelta por etapas, con 100km menos, lo hubieran devorado. Aquí no.
Qué grande eres, Vincenzo. Siempre en mi equipo.
Y yo ya he aprendido la lección.
Cuidado, que Ainara Hernando le plagia el texto.
La mayoría vienen de hacer un esfuerzo muy grande por llegar al grupo… si apenas has tenido tiempo para respirar… pues el trenecito no corre tanto.
Lo más grande de Vincenzo Nibali es que en su fuero interno seguro que creía que nunca ganaría ésta carrera,y aún así decidía honrarla año tras año,y tan grande como eso es que seguro que para él,éste es el triunfo más importante de su carrera,ni Tour,ni Giros,ni Vuelta,ni Hojas Muertas ni leches,por como lo ha conseguido y por la dificultad inherente para un corredor de su tipología que tiene ésta carrera,su mejor triunfo sin duda,y su emoción en meta así lo atestiguaba.Y en cuanto al segundo clasificado,de acuerdo que corre para un equipo siempre cuestionable,pero el chaval tiene 23 años,y ha destacado desde siempre sobre la bici,no me pareció tan sorprendente su final,ya le habíamos visto alguna llegada más así,no en carreras como la M-SR pero si en otras,y alguna gran carrera tenía que ser la primera en la que diera el campanazo el pequeñin.Personalmente me resultó más sospechoso por ejemplo aquél Heinrich Haussler de aquel año que atacó en plena preparación de la volata y casi gana la carrera.Nada más,un saludo,y dudo mucho que veamos unos diez minutos de ciclismo mejores que los del sábado en lo que resta de temporada.
Nibali seguro que le da muchisima importancia a la victoria en MSR, pero por encima de Tour o Giro, lo sie to pero no.
Eso tendríamos que preguntárselo a él….Para Hinault su mundial de Sallanches vale más que un Tour,eso dijo el bretón una vez.
Esta claro que solo el puede decirlo, pero, para un vuelto mano como el, no creo que haya nada superior a ganar el Tour . No es menospreciar lo que es MSR, pero cuando se recuerde a Nibali, de lo primero que se nombrara en su palmares son su Tour, Giros , …
Precisamente por eso, por la dificultad de un vueltómano de hoy en día para ganar un monumento como la MSR, creo que lo valorará más. Pero vamos, que es algo subjetivo.
Hinault ganó cinco Tours, puede que “cambiar” uno de ellos (o que para él valga más, como dices) por su mundial tenga sentido, pero en el caso de Nibali me cuesta creer que prefiera la MSR al único Tour que tiene.
Y además en su país, y del modo en que lo hizo, una de las mayores demostraciones de la historia de superioridad absoluta sobre el resto, era como ver correr a dos especies distintas. Una, el hombre corriente, otra, Hinault.
Sagan es “mucho” mejor bajador que Nibali??
Eso es mucho decir no? No digo que sagan te pueda parecer mejor a secas pero Nibali,pese a haberse dado algún que otro castañazo será de los mejores bajadores que ha habido se siempre.
Yo personalmente pienso que si no se baja un mortirolo mojado o similares en cabeza, no te puedes considerar el mejor.
Tour 2016, Joux Plane y victoria de etapa. Ataca Ion Izagirre. Nibali no puede remontar nada en la bajada.
Nibali es un gran bajador, pero ha tenido mejores época bajando. Hoy en día Sagan en un descenso le pilla seguro.
Aquella etapa del Tour 2016 con Ion Izagirre y Pantano. Ion bajó colosal bajo el diluvio y Nibali no sé si no pudo o no quiso porque no quería arriesgarse a una caída pensando en los JJOO que se disputaba 2 semanas después. Cosas de la vida en Río se cayó en un descenso con Henao cuando olía la medalla. Y la última fue en la Vuelta 2017, la caída en el descenso antes del Angliru.
En el último Giro creo que a Nairo le buscó las cosquillas en una etapa demostrando que sigue habiendo madera de bajador. Y si no lo digo reviento :-), qué diferencia de espíritu y cojones entre uno y otro.
Diferencia de espíritu, de cojones, y por supuesto de palmares. Mientras Nibali lucha siempre hasta el final, el otro festeja un segundo puesto en el Tour, el primero de los perdedores.
Un saludo
Nibali iba ciego de cansancio y Ion subió a ritmo sin salir a los ataques. Los pros sólo fallan en los descensos cuando van exhaustos. Por cierto, Ion se cayó dos (una no se vio) veces en la bajada de la última Paris Niza. No sabe bajar? Iba vacío. Ningun buen bajador baja bien si está exhausto. Nibali es de los muy buenos, Ion también. Sagan es .. de otra galaxia.
La de Ion Izagirre además llovía, donde se supone que Nibali es muy hábil. También se ostió en los JJOO cuando era el más fuerte de ese grupo en una bajada. Y por ejemplo en la famosa del Giro que saltó el reguero de agua y que decían que vaya crack, entra fatal en la curva.
Nibali venía de ganar el mejor Giro desde 1994…
Me acuerdo perfectamente.
claramente no quería arriesgarse a una caída por una ” etapita” para llegar a la Olimpiada en condiciones.
Ion todo lo contrario,puso todos sus cojones y técnica ciclocrosista para ganar un ” etapon” del tour.
Nibali a parte de hacer alguna chorrada para dar la nota como saltar un charco de agua baja y arriesga para ganar monumentos como Lombardía.
Sagan no es ” mucho” mejor bajador que Nibali en mi opinión.
Es un buen bajador, no hay duda, pero yo pienso que es de los que más arriesga, no de los que mejor baja. Pero una de sus muchas cualidades es que no se obsesiona con sus errores y cuando cae en la siguiente vez que necesita arriesgar lo hace.
Bien visto, porque a pesar de su caída en Rio 2016, ha seguido así
Bueno, creo que en su época en el Liquigas arriesgaba más a menudo, ahora dosifica los riesgos. No se puede decir que le ha ido mal, de hecho ha ganado carreras más importantes en los últimos años. No se si un tema de madurez deportiva, o la edad y tener familia hace que se lo piense mejor.
Un apunte al margen de lo deportivo, que hasta parecía premeditado: todas las bicis de la escapada, ¡todas!, eran de marca italiana…
No está mal el apunte…todos los equipos de la fuga eran invitados, salvo Bono del Emirates que se fuga todos los años…todo es un mangoneo tremendo.
¿Al hiperactivo le darán un TUE para meterse anfetaminas? Ya pueden echarse a temblar los pringaos del ventolín.
Su padre es médico y su madre, enfermera. El chaval eligió el ciclismo.
Enric Mas.
el ciclismo lo eligió a él
Y el a Ferrari
Sobre Nibali ya está todo dicho, sabe elegir muy bien el calendario y sabe llegar como un tiro a sus objetivos. Y así está logrando un palmarés de otra época, ampliándolo en horizontal, que es mucho más difícil. Conseguir dos monumentos como Lombardia y San Remo más las 3 grandes está al alcance de muy pocos ciclistas.
Y mientras tanto, Valverde en casa preparando su enésima Volta. Que pena que se vaya a retirar sin hacer ni un intento de ganar la MSR, sin hacer un ataque en el Poggio.
Yo solo agradecer la tarde ( el dia!) de ciclismo disfrute este sabado. No lo hubiera disfrutado jamas de no ser por este blog y los comentarios que aqui se escriben. Es la primera vez que viendo ciclismo me levanto del sofa chillando con los brazos levantados al ver a un corredor llegar a meta. Esto solo me habia pasado viendo al Barça.
Lo que me ha enseñado este blog es que en el ciclismo no hay nacionalidades, ni equipos, sino corredores y doctores.
Hablando de dopaje y deporte rey, en twitter dijiste que estabas preparando un post sobre el deporte rey.
Fake news?
https://as.com/futbol/2018/03/19/seleccion/1521489458_232914.html
Este vide es oro. Los jugadores de la Malta del 12-1 denuncian que los jugadores españoles iban hasta las cejas de esteroides. Solo por ver los balbuceos del capitan Camacho ya vale la pena. 2:51
Como bien apuntan varios comentarios y la propia entrada, no cabe extenderse mucho con Nibali. Muchas luces y sombras. Capaz de lo mejor y de lo peor (esto último, no tanto en estrategia y/o táctica, sino en comportamientos en carrera reprochables). Sin duda, una gran victoria. El sábado recordaba con unos amigos la etapa de La Bola del Mundo de 2010 en La Vuelta. Quién hubiera dicho que ese corredor iba a ser uno de los grandes del ciclismo (como diría Sergio, un saludo a Velits!).
Por palmarés (que puede incrementarse todavía), sin duda lo será. No sé si Nibali puede hacer grande o no a Sanremo. Pero sí creo que su victoria (por cómo ha ganado, y por su trayectoria), abunda en el gran prestigio de la prueba (aunque suene injusto decirlo). Una victoria de Ewan al sprint no le quitaría prestigio. Pero sin duda las grandes actuaciones sirven para reforzar la “leyenda”.
Después de la carrera, ha sido inevitable repasar el palmarés de la prueba, contrastar ganadores y grandes ciclistas que faltan, y ver algún vídeo de los que circulan en Youtube. La parada fácil, la Sanremo de 1991.
Un saludo a la comunidad.
PS: “comportamientos reprochables”, aunque me temo que más extendidos entre sus compañeros de profesión de lo que parece, por lo que he visto en las pocas carreras a las que puedo asistir. Aunque como lo que no se ve por la tele no existe…
Hombre, yo lo decía en 2010, y ahí está el archivo. Ganó esa Vuelta con 25 años, y esa temporada había sido tercero en el Giro ganando de manera increíble la etapa de Asolo.
Sí, sin duda está usted en lo cierto. Por sus referencias, y porque aquellas fechas ya apuntaba a algo grande. Pero no a algo enorme, que es en lo que creo que su trayectoria se (o lo) ha convertido. Sobre todo atendiendo a una regularidad bestial en grandes puestos (trabajo-sistemática, además de talento), y a que en buena parte de las carreras que se toma en serio, aunque no sea máximo favorito, es candidato real.
Muchos dirán que si el Tour 2014 fue por X (como si las caídas no fuesen parte del ciclismo), que si el Giro 2016 o la MSR de 2018 fue por Y (falta de ambición de otros, etc.). Pero si no hay problemas de alquimia-científicos, y aprovecha el par de años que le quedan a buen nivel, puede ser por palmarés un top 20 de la historia.
Personalmente, me ha sorprendido. Podría haber sido un Cunego de la vida (estrellato relativamente pasajero). O un Aru (un par de años muy buenos, para luego pelear por Top 5, pero sin optar realmente a victoria en GV, aunque en este caso él sea todavía muy joven y pueda tragarme las palabras).
Cuestión diferente son los temas de raza kazaja, remolques varios, doctores, etc. Por ello las luces y sombras. En el ciclismo que cambia, es complicado admirar a alguien sin tener ciertas cautelas, por lo que pueda pasar, o por lo que la verdad pueda esconder.
Un abrazo fuerte
En aquella etapa,bajada larguísima del Monte Grappa en mojado,coronan arriba él,Scarponi,Basso,y Evans.Vincenzo se tira p’abajo y el único que lo sigue es Evans,a la segunda o tercera pasada de frenada Evans entra en razón y desiste en seguirlo(y Evans bajaba)…Abajo Vincenzo tiene un minuto de ventaja sobre el terceto.Con alguna de las memorables exhibiciones de Savoldelli,esa de Vincenzo Nibali es una de las mejores bajadas de los últimos 25 Giros.
Opino lo mismo, fue un etapón. A mí el Monte Grappa me parece una subida poco explotada, lo tiene todo para ser un sitio de los más míticos del ciclismo, incluyendo el sagrario en la cumbre
Supongo que te refieres al “santuario”. El “sagrario” está dentro de las iglesias, siendo el lugar donde se deposita el Santísimo. Perdona por la aclaración, sé que era una errata.
no, encantado
Concretamente y en italiano,el lugar es un Sacrário Militare,u Ossàrio…Y el sitio dicen que te deja sin habla (yo no he estado,un familiar si)cuando lo visitas.
Yo creo que de ahí me ha venido lo de Sagrario, por un falso amico lingüistico…
Pues a mi me sigue pareciendo demasiado fantástico el ataque de Nibali y como deja de rueda a Neidlandts y el hueco que abre en seguida. Es un super clase pero en un momento se planta con unos segundos que ya pintan insalvables, y no hablo de la ayuda de la moto que siempre existe.-
Al letón lo suelta en una rampa que parece del 15 %, aunque tampoco se hunde ya que creo que entró entre los 20 primeros.
El duo Sagan, Kiatwoski complementado a veces por Alaphillipe nos van a dar mas momentos de esos “tira tu que a mi me da risa”.
En el Poggio no hay esos porcentajes.
Lo se, por eso me llama la atención como lo deja de rueda.-
El metilfenidato, el famoso Ritalín de Arroyo y compañía en la Vuelta 1982, que se receta a niños con TDAH. Me pregunto qué sentido tiene tenerlo en las lista de estimulantes prohibidos.
No es un tipo de anfetamina que potencia la atención?
Que Nibali iba a ganar se ve en un detalle en la foto de meta, su maillot. El tio va con el mono de una pieza. Entiendo que nadie se hace la carrera mas larga del año, con un mono supuestamente mas incòmodo, para tirar para un sprinter.
Sobre el atropello de Uber, para mi la pregunta no es si atropellará ciclistas, es si lo hará con mas o menos frecuencia que los humanos.
Un saludo.
Perfecta cronica, nada que agregar a esperar un año
El 2012 nibali tuvo un año tremendo, Tirreno, Podio en san remo, podio en lieja, podio tour y un correctisimo mundial donde ataca llegando a la ultima vuelta pero no le dejan.
Este año como masque 2 de esos objetivos uff.
Comparando a Niballi con Valverde, me parece mucho más combativa la manera de ganar de Niballi. Así de primeras y siendo un seguidor de andar por casa, me cuesta recordar algún ataque de Valverde.
Simplemente son corredores diferentes.
Nibali es un vueltomano que apunta a alguna clásica.
Valverde es o debería ser un clasicomano que apunta a grandes vueltas.
Con el final en subida de Valverde no le hace falta atacar de tan lejos, a Nibali si por que simplemente o es rápido.
Con eso, estamos limitando a que Valverde sólo puede ganar carreras con final en subida? Vale que Cipollini sólo pueda ganar carreras al sprint, pero Valverde creo que debería tener más registros.
Lo que no acabaré de comprender nunca es para que va mas de la mitad del pelotón a una prueba así. Todos esos equipos que saben que no tienen ninguna posibilidad al sprint y aún así no dan señales de vida en toda la prueba… Ya se ha comentado demasiado eso
A mi se me ocurre:
1. tienen que ir porque son WT.
2. la escapada ya estaba hecha de salida.
3. van fundidos porque son 300km. no lo olvidemos.
Y finalmente, esta carrera les aporta 300 km de fondo de competición, lo cual a lo mejor les permite hacer la escapada en una carrera de distancia larga que permita más opciones que la MSR.
Un saludo
Correcto. El problema es que la escapada la forman los primeros que lo intentan y ese es el problema y lo que digo que ya se ha comentado muchas veces. Si todos los equipos que no tienen posibilidades serias de vencer se intentaran meter en la escapada esta no saldria a la primera
“El argumento ya ha salido aquí repetidas veces: para que en el ciclismo pasen cosas tiene que haber distancia. La Sanremo es una carrera que desespera a los true believers del ciclismo -la mayoría de ellos, de aluvión- porque aparentemente no pasa nada, aunque haya distancia. En realidad, pasan un montón de cosas que difícilmente se traducen en esa concepción de espectáculo que ha ido formándose en los últimos tiempos: el momento youtube, el buenos contra malos, el un puntito de más.”
Tú y tus dogmas…acaso la última etapa de la Paris-Niza de 110 km fue mala?
Es obvio que la distancia es algo, y que las etapas cortas son otra cosa, y que en el ciclismo actual con medias a 48, no puedes poner 300 km todos los días.
Y a senso contrario en la Tirreno hubieron dos dias seguidos sendas etapas de mas de 200 kms y no pasó nada destacable.
Me encanta cuando Nibali vuelve de las tinieblas o Valverde se va su pirámide de momia, es parte del (mucho) encanto del blog.-
P.D Ya nos pegado el tijeretazo a la etapa de mañana de la Volta.-
GRANDE VINCENZO. Sin ser un clasicómano tiene mas monumentos en su palmares (1 Milán-San Remo y 2 Giros de Lombardía) que Peter Sagan (Tour de Flandes 2016)….. sin olvidar que ha ganado las tres grandes (el Giro dos veces).
Quiero creet que al fibal de la carrera de ambos Sagan tendra mas monimentos que Vicenzo; aunque viendo su actitud en carrera no lo tengo tan claro. Lo importabte es el espectaculo dice. A la altura del dicho futbolero, hemos tenido la posesion.
Yo creo lo mismo pero cada año mi escepticismo aumenta.
Mucho se ha comentado acerca de que Sagan es un ciclista que hace aficion. Pero ¿Qué tiene Sagan que no tenga Nibali? El Tiburon es un ciclista completo, versatil, inteligente, tal vez el mejor del mundo bajando.
Dicho esto ¿Cómo lo vemos para el Mundial de Innsbruck?
Tocayo. Sabes de alguna reseña de los 7 MSR del Canibal. Me gustaria saber como Eddy gano tantas veces una carrera tan complicada. Saludos!