Murió de ciclista
Uno ya no sabe como afrontar la necrológica de un ciclista. Si se intenta hacer empática, no gusta y arrecian las críticas, a pesar de la decisión de la familia de enviar el cadáver a las llamas y dejar todo sin saber. Si se intenta hacer reinvincativo, incluso antes de la Operación Puerto, cae en el olvido, porque hay que pasar página rápido. Supongo que habrá que ir haciendo una plantilla e ir cambiando nombres, porque las muertes de ciclistas seguirán llegando puntualmente, y en el caso de Frank Vandenbroucke de manera anunciada.
Este ciclista no había recibido ninguna atención en este modestísimo blog salvo en tiempos muy recientes, y como reflexión general. Todo lo planteado entonces sigue estando vigente en el momento de su muerte: a pesar de que sus mayores éxitos se remontaban a hace una década, el ciclista seguía gozando de presencia en los medios gracias a sus excentricidades y a su capacidad para generar noticias sobre su vida y andanzas, un poco como un Michael Jackson del ciclismo.… Leer más