Un hemofílico en el deporte de la sangre

Del casting de Crepúsculo

Ya se habrá olvidado, pero el Saunier Duval -un equipo que no necesita presentación, y que acabó como acabó- tenía entre su plantilla médica a una recién titulada en Medicina cuya especialidad era la hematología.

El ciclismo es el deporte de la sangre, siquiera porque ellos mismos bautizaron a los incipientes controles de sangre para vigilar el hematocrito como vampiros, aunque los auténticos vampiros eran otros, como supo el gran público algunos años después.

Después vino la detección de la EPO, la vuelta a las tranfusiones autólogas para la mejora del rendimiento deportivo, los certificados médicos y la búsqueda desesperada de dolencias, en su mayoría inventadas o exageradas, para justificar la toma de sustancias dopantes. Si el ciclismo es el deporte de la sangre, también es el deporte de los asmáticos, aunque este no sea el tema.

El caso del ciclista británico Alex Dowsett es paradigmático.… Leer más