La EPO, libre de patente
De la Wikipedia: “La mayoría de los países conceden patentes para los medicamentos o fármacos recientemente desarrollados o modificados, por periodos de unos 15 años a partir de la fecha de autorización. Las compañías asignan una marca registrada a sus innovaciones, que pasan a ser de su propiedad exclusiva. Además, los nuevos medicamentos reciben un nombre genérico oficial de propiedad pública. Una vez que expira la patente, cualquier empresa que cumpla las normas del organismo regulador puede fabricar y vender productos con el nombre genérico. En realidad la industria farmacéutica es la principal impulsora de la extensión del sistema de patentes, y ha presionado a los países en desarrollo para hacerles seguir este sistema”.
Hace dos semanas Carlos Arribas publicó un extenso e interesante reportaje sobre la lucha contra el dopaje. Inusualmente bien desarrollado, pero con las típicas concesiones a las lágrimas y a su necesidad vital -vive de ello- de creer en el ciclismo, explicaba el arbol genealógico de la CERA, que remonta hasta el 2004.… Leer más